Hoy en día somos capaces de conversar online en tiempo real con alguien que esté en la otra punta del mundo, de visionar al momento los últimos acontecimientos en vídeo sin pagar un euro y desde la red, o de trabajar en la distancia sin acudir a nuestro puesto de trabajo. En el mundo globalizado de hoy, son todo ventajas o también hay algún inconveniente. En este artículo se abordan las diferencias geográficas de acceso a la red.
¿Es todo tan hermoso? No. Las desigualdades entre pueblos que existen en la economía y en la sociedad también quedan reflejadas en el consumo de la red. En los países del llamado tercer mundo, por suerte, todavía quedan iniciativas loables que luchan por extender el acceso a Internet por todo el planeta. Otra cuestión es conseguir dispositivos para ello, un frente donde todavía quedan numerosas batallas que librar en los próximos años. Aunque el Internet móvil esté repercutiendo cómo la mayor figura de democratización de acceso a la red, cómo nunca ha habido otra antes.
El mapa geográfico de Internet reseña con claridad las diferencias norte-sur marcando los flujos de acceso a la red en la Tierra. África y América del Sur se llevan la “peor parte” en las estadísticas. Sorprendentemente, Europa consume más Internet que Estados Unidos y Canadá. No obstante, sigue existiendo un problema en el terreno del emprendimiento, y es que la mayoría de las grandes corporaciones de la red han surgido en Estados Unidos y son las que marcan las reglas. Con todo, 8 de las 25 grandes empresas más grandes de Internet son de fuera de Estados Unidos.
Pero esta hegemonía de Estados Unidos en términos empresariales no se traduce en un consumo masivo del tráfico de Internet proveniente de allí: el 81 por ciento del tráfico de los sitios líderes viene de fuera de Norteamérica, dato que reivindica el potencial de otros mercados como el Europeo a la hora de consumir contenidos digitales. Una lástima, sin embargo, que los beneficios que aporta esta audiencia masiva no repercutan en términos geográficos sobre corporaciones ajenas al país de las libertades.
Silicon Valley tiene un tremendo potencial a la hora de generar nuevas e innovadoras empresas que ejecuten con maestría comercial sus ideas, con un ecosistema de emprendedores con éxito y mucho cash en la mano que reinvierten en nuevos emprendedores que empiezan. Centros de negocio internacional como éste dirigen la innovación y generan puestos de trabajo muy cualificados que tanto se necesitan en la actualidad. Creo que es necesario apostar más por viveros de empresas en las grandes ciudades para crear las que en una década o más podrían convertirse en las cunas de futuros Steve Jobs.
Así las cosas, se produce una dicotomía reseñable en la red. Los productores de contenidos vienen en su mayoría del gigante de Occidente, esto es, Estados Unidos. En cambio, los consumidores está repartidos en su mayoría por el resto de los países principales. Esto me lleva a pensar que los clientes (el público objetivo) está en manos de unos pocos y los beneficios repercuten sobre un reducido número de mercados.
Que Internet se gestione desde una perspectiva globalizada es favorable para el internauta hasta límites que no sospechamos, sobretodo para movilizarse en campañas de protesta en redes sociales o para comprar al mejor precio mediante el comercio electrónico. Quienes critican la globalización por la pérdida de valores locales en la sociedad no se agarran a la red como herramienta para reafirmar esos mismos aspectos. Internet es una herramienta que dará uno u otro resultado en función de su utilización. De nosotros dependerá convertirnos en entes planos o defender nuestra cultura en base al poder de la red.
* Este artículo es fruto de la colaboración entre Emilio Márquez (@EmilioMarquez) y TICbeat. Emilio Márquez es Business Ángel y emprendedor, CEO de Networking Activo. En su blog se pueden seguir posts muy interesantes sobre Networking y el mundo de Internet en general.