Crean el primer dispositivo que enfría los electrones a la temperatura criogénica de -228 grados centígrados sin servirse de ningún tipo de refrigeración externa.
El consumo energético es el gran caballo de batalla de los dispositivos electrónicos de consumo. Ninguno de los tablets y smartphones actuales ha logrado todavía dar un verdadero salto en el consumo energético que permita alargar la autonomía de la batería más allá de un día. Utilizando estos dispositivos en todo su potencial, claro está. Con cuidado, quizá logres que dure dos días, lo que sigue dejando mucho que desear.
Esto podría cambiar cuando el nuevo desarrollo de la UT Arlington, en Estados Unidos, se abra camino hasta el mercado de consumo y cumpla todo lo que promete. Un equipo de desarrolladores del centro ha creado el primer dispositivo que enfría los electrones a la temperatura criogénica de -228 grados centígrados sin servirse de ningún tipo de refrigeración externa. ¿Cómo se logra esta magia?
Mediante un “hueco cuántico”, un diminuto espacio ubicado entre dos semiconductores que sólo permite el paso de electrones de muy baja energía, esto es, muy fríos. Una vez logrado ese flujo de electrones fríos, añaden otros componentes al combinado, como transistores. En UT Arlington añadieron transistors de electron único (SET) y funcionaron a las mil maravillas pese a estar a temperatura ambiente, gracias a los electrones a temperatura criogénica.
Dispositivos 10 veces más eficientes
Según Usha Varshnev, parte de la National Science Foundation que financia la investigación, “al implementarse en transistores, los hallazgos de los investigadores podrían reducir el consumo de energía en dispositivos electrónicos más de 10 veces comparados con las tecnologías actuales”. Como indica ExtremeTech, esta reducción en el consumo se podría trasladar al conjunto de los dispositivos, desde la autonomía hasta el rendimiento, el tamaño o el peso.
Como siempre, se trata apenas del primer paso en el desarrollo de una nueva tecnología. Pero si las cosas siguen su curso adecuadamente, como parece, el paso podría convertirse en un salto y quizá en menos de una década podamos ver una nueva generación de dispositivos con “refrigeración cuántica” que, además de tener un nombre molón, cambien radicalmente el panorama actual.
http://innovacion.ticbeat.com – INNOVAticias