Este robot es el primero en mostrar un ciclo vital completo y es que cuando deja de ser útil y si lo introducimos en acetona, éste se diluye y desaparece. Para su funcionamiento tan solo hay que aplicar un poco de calor. En este instante la lámina de papel se plegará convirtiéndose en un pequeño robot.
Investigadores del MIT han presentado recientemente en la conferencia de robótica ICRA que tiene lugar en Seatle un diminuto robot formado por una lámina de papel y plástico y un imán. Este dispositivo que es capaz de desplazarse a una velocidad de 3 o 4 centímetros por segundo e incluso de transportar dos veces su peso ha sorprendido por ser capaz de ir más allá de lo que aparenta físicamente.
El robot está formado por una fina capa de PVC rodeada de poliestireno o papel. En el corazón del dispositivo se encuentra un imán. Entre sus características destaca que es capaz de desplazarse por el agua, caminar siguiendo rutas, completar tareas sencillas tales como mover piezas o colocarlas e incluso cargar peso.
EP – INNOVAticias