La escuela de Larrabetzu cuenta con un invernadero que abastece el comedor con verduras ecológicas, al tiempo que sirve como herramienta de sensibilización al alumnado sobre la producción alimentaria y la gestión de residuos.
La Asociación de padres y madres de la escuela pública de Larrabetzu lleva diez años encargándose de forma integral de la gestión del servicio de comedor escolar.
Con el objetivo de asegurar una dieta equilibrada y saludable para sus hijas e hijos, potenciando para ello unos ingredientes de primera calidad y una elaboración esmerada, y dando prioridad a los productos locales, frescos y de temporada, la Asociación ha optado desde 2008 por desarrollar este modelo de autogestión en el comedor del centro.
Esta fue la primera escuela en gestionar su comedor y se ha convertido en un referente para otros centros de enseñanza interesados en recorrer este mismo camino.
Los resultados de esta iniciativa son reseñables: un 17% del consumo es de procedencia ecológica, las compras y menús se ajustan a las necesidades de consumo y se valorizan todos los residuos orgánicos.
La apuesta por la máxima calidad sin variar el precio de servicio, que se sitúa en el establecido por el Gobierno Vasco se lleva a cabo mediante el abastecimiento con productos de baserritarras y comercios locales.
La escuela evita el desperdicio alimentario valorizando todos los residuos orgánicos (4 toneladas/año) creando cerca de 800 kg de compost por curso escolar.
La Asociación de padres y madres realiza directamente las compras, ajustándose al máximo al consumo, para evitar el despilfarro y realizar una buena gestión económica de los residuos.
Esta experiencia está recogida en el documento “20 Buenas Prácticas de Alimentación Circular” editada por la sociedad pública Ihobe del Gobierno Vasco.
Fuente: Ihobe