La Conferencia Mundial sobre el Clima y la Salud 2025 es un encuentro que busca situar en el centro de la agenda climática tanto a la salud, como a la equidad, dos temas candentes en Latinoamérica y en el mundo. Además, servirá como reunión preparatoria para la cumbre del clima que también se celebrará en Brasil, puesto que será Belém do Pará quien acoja a la COP30 en noviembre.
Este encuentro, que comenzó ayer martes 29 y se extenderá hasta mañana 31, tiene como temas centrales el clima y la salud. La idea central es buscar soluciones eficientes a la problemática que el cambio climático y sus consecuencias puede tener sobre la salud de los afectados, especialmente en los países y poblaciones que resultan más vulnerables.
Salud, Clima y vulnerabilidad
La Conferencia Mundial debate formas de promover la salud como uno de los pilares de la acción climática meses antes de la celebración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30), prevista para noviembre en Belém do Pará, Brasil.
El evento, que reúne a representantes de gobiernos, el sistema de las Naciones Unidas y ONG, busca que los participantes discutan sobre las políticas de adaptación sanitaria al cambio climático y aborden los beneficios para la salud derivados de la acción climática a nivel internacional y nacional.
La organización de la Conferencia está a cargo del Gobierno de Brasil, la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Alianza para la Acción Transformadora sobre el Clima y la Salud (ATACH).
Los sistemas deben ser resilientes
Mientras América se enfrenta a temperaturas récord, brotes de enfermedades y fenómenos climáticos cada vez más destructivos, el director de la OPS pidió durante la inauguración del evento que se tomen “medidas urgentes” para situar la salud y la equidad en el centro de la agenda climática.
“Las poblaciones en situación de vulnerabilidad son las más afectadas por estos impactos climáticos, aunque son las menos responsables de ellos”, advirtió Jarbas Barbosa, quien también destacó el apoyo de la OPS a los países en la construcción de sistemas de salud resilientes al clima.
“Estamos trabajando con los Estados miembros para desarrollar planes nacionales de adaptación en materia de salud, mejorar la infraestructura sanitaria, reforzar la vigilancia de las enfermedades sensibles al clima y elaborar medidas clave para anticipar, prevenir, prepararse y responder a los fenómenos relacionados con el clima y mitigar sus efectos sobre la salud”, declaró. Para ampliar estos esfuerzos, enfatizó en la necesidad de apoyo financiero.
¿Qué se propone de cara a Belém y su COP30?
Esta es la quinta Conferencia Global para analizar estrategias de la salud y el clima y contará con sesiones, talleres y mesas redondas sobre tres temas: vigilancia sanitaria, estrategia política basada en la evidencia y capacitación, e innovación y producción.
Las sesiones abordarán distintos temas, como el Índice de Salud Ambiental Infantil; los efectos de la sequía en los nacimientos, las hospitalizaciones y la mortalidad en Brasil; el derecho al aire limpio; un plan de cambio climático y saludo andino (Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela); el uso de la inteligencia artificial para crear sistemas de salud resilientes al clima; o la situación de la Amazonía.
Los resultados de los debates se integrarán en las propuestas para el borrador del Plan de Belém sobre Acción para la Salud, la hoja de ruta para integrar la salud en la política climática mundial.
El cambio climático no solo se experimenta mediante olas de calor o eventos extremos, la salud de las personas tienen una afectación enorme que va más allí de que suba la temperatura. Por causa de la crisis climática, la gente se expone a enfermedades y condiciones médicas de todo tipo, tanto directa como indirectamente, y ese es un tema que se debe tratar a fondo y para el que hacen falta recursos y soluciones. ECOticias.com