El concepto de transición justa se centra en garantizar que las transformaciones necesarias hacia una economía baja en carbono no dejen atrás a las comunidades trabajadoras ni a los sectores más vulnerables. Por eso, ONGs ambientalistas de España reclaman políticas que combinen la descarbonización con la creación de empleo verde, la equidad social y la participación ciudadana, de modo que el proceso sea inclusivo y sostenible.
Retos que, para estas entidades, se deben abordar en la próxima celebración de la COP30 (que tendrá lugar en un mes en Brasil), junto a la protección de los bosques y una mayor financiación climática para la poder garantizar la supervivencia del planeta.
Los puntos clave que debe abordar la COP30
A un mes del inicio de la COP30 que se celebrará a las puertas del Amazonas, en Brasil, en noviembre, el ecologismo español destaca como principales retos de la cumbre la protección de los bosques, una transición justa en la senda de abandono de combustibles fósiles y una mayor financiación climática para la supervivencia del planeta.
Estos han explicado que es necesario que en dicha cumbre de Estados al más alto nivel político, en la ciudad brasileña de Belém, «los gobiernos se pongan las pilas, porque tiene que salir un mecanismo de acción climática para la transición justa». «No puede ser una cumbre de paso, de turismo en la Amazonía; se piden acuerdos y compromisos compatibles con las directrices científicas», han asegurado. Se necesita además «mayor concreción de medidas y asimismo garantías de una financiación adicional».
Más compromisos climáticos
«Muchísimos países incluida la UE han sido incapaces de llegar a tiempo a presentar nuevos compromisos», han advertido. Por eso han advertido de «regresión y posiciones temerarias» por parte de algunos países de la UE y asimismo fuera de ella, en referencia a la postura climática del presidente estadounidense, Donald Trump.
«Nos preocupan los combustibles fósiles, faltan menciones claras» para eliminarlos; la presidencia de la COP30 debería apostar claramente por el abandono de los mismos como «prioridad«, han añadido. Han dicho además sobre la COP30, que tendría que haber ido precedida del anuncio de nuevos compromisos climáticos de los países para aumentar su ambición; sin embargo muy pocos países han cumplido con los plazos establecidos por la ONU para presentarlos a tiempo, ha advertido.
Incrementar la financiación para adaptación climática y consolidar el acuerdo de aumentar hasta 1,3 billones de euros anuales la movilización financiera pactada en la cumbre anterior en Bakú (Azerbaiyán), son otras de las prioridades de la COP30. Además, la protección de los bosques durante la próxima cumbre será «clave» para combatir el cambio climático. La destrucción de bosques aumenta las emisiones, por lo que «es crucial» mantenerlos y mejorar su gestión y la cobertura vegetal del planeta para absorber emisiones.
La Amazonía, reservorio de la biodiversidad
«La Amazonía es el gran reservorio de la biodiversidad del mundo; hay que fomentar «un plan de acción para detener la deforestación» han dicho, tras añadir que confía en que se apruebe un plan para detenerla como muy tarde en 2030. Por eso, piden fechas y acciones concretas de los países para acelerar la eliminación de combustibles fósiles con una apuesta por las energías renovables y una mejor adaptación a los desastres del clima.
Se deberían acordar impuestos especiales a dichos combustibles y nuevos fondos por parte de los países para la acción climática, han añadido. Así, estas entidades han pedido que se refuerce la credibilidad del Acuerdo de París -del que se cumplen diez años- para controlar las emisiones de CO2 como principal causa del efecto invernadero del planeta. «Se necesitan decisiones transformadoras, cooperación internacional y justicia climática», que repercutan en un aumento de la ambición, financiación y protección de la naturaleza.
«Pedimos planes climáticos más ambiciosos para 2030-2035, que incluyan la eliminación progresiva de combustibles fósiles con calendario y seguimiento, así como la eliminación de los subsidios a los fósiles y que estos se redirijan hacia una transición justa». Demandan, además, «triplicar la capacidad renovable y duplicar la eficiencia energética antes de 2030». Detener la deforestación y restaurar los ecosistemas es otro de los grandes puntos pendientes, aseguran
Asimismo, integrar los océanos, la agricultura y la biodiversidad en los compromisos climáticos y asimismo crear un fondo permanente para los bosques tropicales en cuanto a adaptación y resiliencia. «Pedimos además que se cumpla el compromiso de la Hoja de Ruta de Bakú a Belém de movilizar 300.000 millones de dólares anuales para 2035 en países en desarrollo y alcanzar 1,3 billones de dólares anuales con participación de todos los actores», han finalizado.
A través de su participación en la COP30, las entidades ecologistas españolas buscan impulsar acuerdos que garanticen justicia climática, cooperación internacional y un futuro más resiliente para las generaciones venideras. En la ciudad de Belem se celebrará esta Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático, donde se verán realmente los compromisos de los países en este sentido. EFE / ECOticias.com















