Honduras puede ahorrar hasta el 30 por ciento de energía con campañas de concienciación en los consumidores, aunque las tarifas seguirán en alza en tanto la matriz energética siga dependiendo del petróleo, advirtieron ayer expertos durante un foro celebrado en Tegucigalpa.
Las tarifas de la energía seguirán en alza en tanto la matriz energética, dependa de los precios del petróleo en el mundo.
“La motivación para una campaña de eficiencia de energía es que la gente paga lo que consume, pero todo pasa por la capacitación de la sociedad”, dijo el consultor brasileño Eduardo Nobre, panelista principal del foro “Experiencia de Brasil con Programas y Proyectos de Eficiencia Energética”, patrocinado por la Agencia Alemana de Cooperación Internacional (GIZ) y la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (Serna).
La campaña debe comenzar con un plan para conocer el mercado, identificar dónde hay posibilidades de ahorro y después preparar a los niños, predios públicos, electricistas y otros sectores claves a los que se pueda concienciar sobre la eficiencia energética, aconsejó Nobre.
Explicó que para el Estado es mucho más barato ahorrar cuatro kilovatios que producir uno, aparte que hay una incidencia directa de ahorro en la factura del consumidor.
A su criterio, Honduras puede lograr un mínimo ahorro del 15 por ciento de la energía que vende entre la población, pero agregó que esto es sólo un complemento a los proyectos alternativos de energía renovable, que resultan de menor costo con respecto a los energía térmica.
Nobre se opuso rotundamente a la privatización de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) por considerar que es fundamental en los procesos de uso racional de energía y el desarrollo del país.
Al respecto, el director de programas de energía renovable para Centroamérica de la GIZ, Rainer Schoroeer, estimó en un 30 por ciento la capacidad de ahorro que podría tener Honduras si aplica medidas de eficiencia energética.
Agregó que su representación está invirtiendo alrededor de un millón de dólares (más de 18 millones de lempiras) en programas de ahorro, al tiempo que aconsejó acelerar la elaboración de la ley de uso racional de energía que está en proceso en el país.
Tanto Nobre como Schoroeer admitieron que las tarifas de la energía seguirán en alza en tanto la matriz energética, 70 por ciento de la cual es generada por las plantas térmicas, dependa de los precios del mercado del petróleo en el mundo.
“Eso es imposible evitarlo, a menos que Honduras descubra y produzca su propio petróleo”, advirtió Nobre. “El ahorro es sólo un complemento a los proyectos y programas de energía renovable, mientras haya dependencia del petróleo las tarifas seguirán en alza”, subrayó Schoroeer.
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