Nueva planta de biomasa vegetal y captura de CO₂ en la localidad leonesa de La Robla. Por fin se ha dado luz verde ambiental y autorización para que esta planta de cogeneración con bioamasa Roblum pueda ponerse en marcha como parte de un proyecto conocido como La Robla Green y que incluirá una planta de captura de dióxido de carbono (CO₂) con capacidad para procesar 408.000 toneladas anuales.
La instalación, que ya cuenta con el visto bueno del Servicio Territorial de Industria, Comercio y Economía de León, contará con una potencia de 49,99 MW eléctricos y 142 MW térmicos que se generarán, como combustible principal, con el empleo de biomasa vegetal procedente de explotaciones agrícolas.
Antes de tomar dicha resolución administrativa, como parte del desarrollo de este proyecto se ha evaluado el impacto ambiental de la planta, además de tramitarse los permisos pertinentes de acceso y conexión a la red eléctrica.
Luz verde a la plata de biomasa vegetal y captura de CO₂ en La Robla (León)
El Servicio Territorial de Industria, Comercio y Economía de León ha concedido la autorización ambiental para la planta de cogeneración con biomasa Roblum en La Robla (León), un proyecto que forma parte del complejo La Robla Green y que incluirá una planta de captura de dióxido de carbono (CO₂) con capacidad para procesar 408.000 toneladas anuales.
La instalación, promovida por Desarrollos Renovables Abies S.L., tendrá una potencia de 49,99 MW eléctricos y 142 MW térmicos, utilizando biomasa vegetal procedente de explotaciones agrícolas como combustible principal.
La resolución, publicada este jueves en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl), llega tras un largo proceso administrativo que ha implicado la evaluación de impacto ambiental, la tramitación de permisos de acceso y conexión a la red eléctrica, así como la resolución de alegaciones de propietarios de terrenos y organizaciones ecologistas en el marco del trámite de información pública.
La autorización ambiental para esta planta, enfocada a la producción de energía eléctrica a partir de fuentes renovables, integra las prescripciones para prevenir, reducir y vigilar la contaminación atmosférica y acústica, además de las condiciones relativas a la producción de residuos y las prescripciones de aplicación en materia de suelos contaminados.
De igual modo, aglutina las prescripciones relativas a la protección de los suelos y las aguas subterráneas, así como el condicionado de la declaración de impacto ambiental.
El agua se extraerá principalmente del río Bernesga, teniendo además un pequeño consumo de agua potable de la red municipal. Se utilizará en la planta de generación, previo paso por una planta de pretratamiento, y en el sistema de protección contra incendios.
El tratamiento de las emisiones de los gases de combustión de la caldera se realizará con un sistema de desulfuración para reducir las emisiones de óxidos de azufre, cloruro de hidrógeno y fluoruro de hidrógeno.
Y también gracias al uso de carbón activado pulverizado para eliminar metales pesados (Hg), dioxinas y furanos; y a la apuesta por un sistema de reducción catalítica selectiva para reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno.
Asimismo, sumará un sistema de ciclones y filtros de mangas para eliminar partículas; así como una torre de absorción, donde se captura el CO2. EFE / ECOticias.com