Encuentran paneles solares flotando en los Alpes en medio de la nieve y, de hecho, su disposición ha provocado algo extraño. Se trata de un proyecto casi tan sorprendente como este muro de levitación magnética capaz de sustituir a los paneles solares convencionales. Cada vez es más frecuente ver instalaciones de paneles solares flotantes en acequias y embalses para producir energía. Al mismo tiempo, esta localización permite frenar la evaporación de agua en instancias de sequía.
Por ahora, los Alpes suizos no se enfrentan a escasez de agua. Sin embargo, recientemente han encontrado un motivo importante para implantar células fotovoltaicas flotantes. Las placas solares flotantes representan instalaciones fotovoltaicas ejecutadas en superficies marítimas, pantanosas o acuosas.
Otra expresión y configuración distinta de la energía solar, cuyo uso se extiende cada vez más por sus bondades en todo el mundo. Teóricamente, cualquier espacio rodeado de agua sería óptimo para la instalación de placas solares flotantes.
Ya sea que hablemos de océanos, lagos, presas o pantanos, todos conforman terrenos válidos para la localización de módulos fotovoltaicos. Según registra el portal Tu Energía, generalmente la temperatura alrededor del agua tiende a ser inferior que la de la superficie. Teniendo en cuenta que los módulos pierden eficiencia con el calor, la estimación es que los paneles solares flotantes alcanzan un rendimiento superior de entre un 10 y un 15%.
Cubren de paneles solares los Alpes suizos: están en medio de la nieve y han conseguido algo impensado
En 2019, la compañía suiza Romande Energie colocó un parque solar flotante de 448 kW en Lac des Toules, la primera instalación de estas características situada en un embalse a 1.810 metros sobre el nivel del mar. 35 plataformas son cubiertas por paneles solares bifaciales y se extienden por el 2% de la superficie del lago.
Las plataformas flotan ancladas al fondo de junio a diciembre, cuando el embalse se encuentra lleno por el agua del deshielo. El resto del año, los paneles solares reposan sobre el suelo.
Un equipo de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Zúrich ha estudiado la instalación flotante del lago. Investigación en la que llegaron a la conclusión que el pequeño parque solar provoca un efecto ‘extraño’: recupera la inversión energética en tan solo 2,8 años por la mayor radiación. El análisis evaluó el impacto ambiental del sistema desde la extracción de las materias primeras hasta la culminación de su vida útil.
Los expertos en la materia compararon esta instalación de alta montaña con sistemas flotantes situados en altitudes bajas, además de instalaciones terrestres. Dichos resultados evidencian que la huella de carbono del sistema flotante de Los Alpes es de unos 94 g CO2-eq por kWh de electricidad generada, un valor considerablemente más bajo que el de las instalaciones solares tradicionales.
Pese a la eficiencia demostrada, los investigadores concluyeron que todavía existe margen para disminuir el impacto ambiental y los costes vinculados a estos sistemas. Por ejemplo, bajando el uso del aluminio para que sean piezas más compasivas con el entorno.
Suiza construirá el mayor parque de energía solar en los Alpes
Siguiendo la línea renovable, Suiza empezó a construir su mayor parque de energía solar en los Alpes. Dispondrá de un total de 5.700 paneles solares que aportarán suministro a los 6.500 hogares de cantón de los Grisones (sureste) y ubicado a 2.200 metros de altitud. Su instalación producirá electricidad durante el invierno, cuando otros paneles de zonas bajas quedan cubiertos por la niebla.
Con la implantación de paneles solares en medio de la nieve, los Alpes queda en el punto de mira sostenible del mundo. Un contexto que nos hace recordar a España, que ha techado esta ciudad de paneles solares.