Una pandemia silenciosa está devastando al erizo Diadema africanum en las Islas Canarias y amenaza con provocar un colapso profundo en los ecosistemas marinos del archipiélago. Estos erizos negros, comunes en los fondos rocosos canarios, cumplen una función ecológica esencial: controlar el crecimiento de las algas.
Su desaparición masiva está alterando de forma drástica el equilibrio del litoral. Desde finales de 2023, científicos y buceadores han observado una mortandad sin precedentes de erizos Diadema, causada por un patógeno aún en estudio, posiblemente vinculado a bacterias o virus favorecidos por el aumento de la temperatura del agua.
En algunas zonas, la población de erizo Diadema ha caído más de un 90 %, dejando amplias áreas marinas sin uno de sus principales herbívoros.
Colapso ecológico: el erizo Diadema desaparece de Canarias
Un equipo de investigadores de la Universidad de La Laguna y del Instituto de Enfermedades Tropicales y Salud Pública de Canarias ha demostrado que un evento de mortalidad masiva entre 2022 y 2023 ha llevado a la casi extinción local de los erizos de mar Diadema africanum.
Este último brote ha tenido un mayor impacto que los ocurridos en 2008 y 2018, ya que en esta ocasión la producción de larvas y el reclutamiento de juveniles prácticamente ha cesado, detalla la institución académica en un comunicado.
Los patógenos que causaron la enfermedad en el erizo Diadema aún no se conocen con certeza, pero se han reportado muertes similares de erizos de mar casi simultáneamente desde el Caribe hasta el Océano Índico occidental.
En algunas zonas, la población ha caído más de un 90 %, dejando amplias áreas marinas sin uno de sus principales herbívoros.
Los erizos de mar son ingenieros de ecosistemas, el equivalente marino de los megaherbívoros terrestres. Al pastar y desmenuzar algas y pastos marinos, controlan el crecimiento de las algas y promueven la supervivencia de organismos de crecimiento lento como los corales y algunas algas calcificantes.
Asimismo, son presa de una gran cantidad de mamíferos marinos, peces, crustáceos y estrellas de mar.
Sin embargo, cuando se vuelven sobreabundantes, o cuando estos depredadores sufren una sobrepesca o caza excesiva, los erizos de mar también pueden causar daños a los hábitats marinos y formar los llamados ‘desiertos de erizos’.
Una pandemia arrasa el erizo Diadema y hunde los ecosistemas canarios
Ahora, un estudio publicado en Frontiers in Marine Science ha revelado que en los últimos cuatro años una pandemia no reconocida que ha estado exterminando a los erizos de mar en todo el mundo ha afectado a las islas Canarias.
Las consecuencias para los ecosistemas marinos aún no se conocen por completo, pero es probable que sean profundas, apuntan los investigadores Carlos San Gil, José Carlos Hernández y Jacob Lorenzo.
El género Diadema comprende ocho especies que habitan aguas subtropicales y tropicales de todo el mundo. Entre ellas se encuentra el africanum, que solía prosperar en arrecifes rocosos frente a África occidental y las Azores, a profundidades de entre cinco y veinte metros.
En Canarias, su población se había incrementado desde mediados de la década de 1960, probablemente debido a la sobrepesca de depredadores y al calentamiento global.
En algunos lugares del archipiélago, el aumento de su población incluso provocó en el pasado ‘blanquizales’ o ‘desiertos de erizos’, lo que motivó esfuerzos infructuosos de control biológico entre 2005 y 2019.
En Canarias, su población se había incrementado desde mediados de la década de 1960, probablemente debido a la sobrepesca de depredadores y al calentamiento global.
En febrero de 2022, los investigadores observaron que el erizo Diadema africanum había comenzado a morir masivamente en La Palma y La Gomera.
Al extenderse hacia el este por el archipiélago a lo largo de ese año, la enfermedad provocó que los erizos de mar se movieran menos y de forma anormal se volvieran insensibles a los estímulos y perdieran las espinas antes de morir.
A principios de 2008, y de nuevo a principios de 2018, una enfermedad eliminó a aproximadamente el 93 % de los individuos de erizo Diadema africanum en las costas de Tenerife y La Palma, y al 90 % en las islas del vecino archipiélago de Madeira.
Pero el brote de 2022 fue diferente: si bien muchas poblaciones afectadas se recuperaron, a veces con una rapidez sorprendente, tras el evento de 2008, esto no pareció ocurrir en 2022.
En cambio, una segunda ola de mortalidad masiva azotó las islas Canarias a lo largo de 2023.
Para evaluar el impacto de la mortandad, los investigadores analizaron las poblaciones de Diadema africanum en 76 puntos de las siete islas principales del archipiélago entre el verano de 2022 y el de 2025, comparándolas con datos históricos.
Canarias frente a un futuro incierto para sus ecosistemas costeros
Los análisis realizados han mostrado que la abundancia actual de Diadema africanum en Canarias se encuentra en su nivel más bajo, con varias poblaciones al borde de la extinción local.
El impacto no es solo ecológico, sino también económico. La degradación de los ecosistemas marinos amenaza actividades clave en Canarias, como la pesca artesanal y el turismo de buceo, que dependen de la riqueza y diversidad del medio submarino. Además, la recuperación natural del erizo Diadema es lenta, lo que agrava el riesgo a largo plazo.
Ante esta situación, la comunidad científica reclama medidas urgentes: seguimiento continuo de la pandemia, protección de las poblaciones supervivientes y reducción de otras presiones humanas, como la contaminación y la sobrepesca. Seguir leyendo en EFE /ECOticias.com

















