En la búsqueda actual de la descarbonización han aparecido varios vehículos llamativos, como los coches eléctricos y de hidrógeno. Sin embargo, nunca habíamos visto hasta ahora el “coche de nieve”. Resiste temperaturas extremas, no contamina y dispone de una tecnología de Fórmula 1. Es casi seguro que querrás hacerte con él.
Antes de que un modelo salga al mercado, los automóviles en desarrollo, sin importar si son eléctrico o de combustión, deben demostrar que están preparados para salir airosos de cualquier situación.
Para determinar que el «coche de nieve» era apto para circular por las carreteras, antes debe someterse a varias pruebas extremas en las que demuestre su fiabilidad a temperaturas que alcanzan los –30 grados. Algunos de los “exámenes” que se deben pasar nunca sucederían realmente en la vida diaria, pero los expertos deben llevarlo al límite.
El “coche de nieve” aguanta temperaturas extremas y llegará en junio
El “coche de nieve” al que nos referimos es Alpine A290, que se enfrenta a la prueba más difícil para un coche eléctrico: el frío intenso. En este caso, las pruebas son especialmente importante debido a que hay baterías que pierden parte de su capacidad ante las bajas temperaturas. Esto hace que la autonomía del automóvil eléctrico baje en invierno y el conductor deba replantearse varios de sus planes.
Alpine lleva más de dos años desarrollados el modelo A290, su primer automóvil eléctrico. En la actualidad, está probando su fiabilidad ante temperaturas que pueden descender por debajo de los 30 grados.
El equipo de desarrollo de la pieza francesa se ha movido a Suecia, cerca del Círculo Polar Ártico. Allí ha comprobado cómo funcionado este nuevo modelo en condiciones de baja adherencia. Todavía está en la fase prototipo, por lo que cada detalle es importante para los ingenieros y diseñadores.
A partir de sus anotaciones se tomarán decisiones. El foco está puesto en la reacción del motor, reactividad, precisión de conducción y agilidad. La meta es que la experiencia de conducción sea óptima aún en condiciones extremas.
También se hace la prueba con una amplia gama de equipamientos, como la calefacción, la calidad del desempañado y del deshielo y el ESC (control electrónico de estabilidad) sobre nieve. “Se trata de puntos que no pueden reproducirse en un centro técnico y que solo pueden validarse en condiciones de frío extremo”, aportan desde Alpine.
El “coche de nieve” llega en cuestión de meses: aguanta temperaturas extremas
Las pruebas realizadas en la Laponia sueca han servicio también para que el automóvil eléctrico haga su debut oficial. Se han divulgado las imágenes del vehículo cubierto de camuflaje. Así hemos podido saber que estamos ante un deportivo de segmento B con el logotipo de la marca en el techo y una pequeña parte de la carrocería descubierta y pintada de azul.
El fabricante ha aprovechado la ocasión para confirmar cuáles serán sus dimensiones: 3.990 mm de largo, 1.820 mm de ancho, 1.520 mm de alto y una batalla de 2.530 mm.
Si el “coche de nieve” te sorprende, espera a ver su volante
Alpine ha revelado que “el coche de nieve” no solo es llamativo por soportar temperaturas extremas, sino también por su exclusivo volante deportivo de cuero, con una superficie achatada y un marcador a las 12 inspirado en el motorsport.
Además, cuenta con tres funciones clave presentes en los volantes de Fórmula 1 de Alpine: OV (Overtake), RCH (Recharge) y un acceso directo a sus diferentes modos de conducción. Para las pruebas apodadas “gran frío”, el modelo A290 viene equipado con neumáticos de altas prestaciones Michelin Pilot Alpin 5 para incrementar el rendimiento de frenado y la precisión de conducción en condiciones invernales severas.
Apenas quedan unos meses para que podamos disfrutar del “coche de nieve” capaz de soportar temperaturas extremas. No es exactamente «de nieve», pero sí está preparado para soportar climas que la tengan como consecuencia. Un antes y un después en el mercado eléctrico que no tuvo lugar ni ante la clave para aumentar la autonomía de los coches.



















