Los viajes rápidos han cambiado España, pero el trayecto en tren de alta velocidad (AVE) entre Valencia y Madrid sigue siendo una barrera que requiere casi dos horas y media. Los ingenieros saben que la clave para ir más rápido es vencer la fricción, pero los trenes, por muy potentes que sean, siempre serán frenados por la resistencia del aire.
La promesa de los viajes rápidos
Por muchísimos años, la idea de reducir tanto el tiempo de viaje era solo una fantasía que se veía en las películas, pero ahora, ese sueño se está volviendo realidad, pues se viene una promesa de reducir el viaje de Valencia-Madrid a solo 30 minutos.
Esto no es solo ahorrar tiempo; es una revolución para la vida y la economía, porque haría que Valencia y Madrid se sintieran como si fueran ciudades vecinas. La gente podría vivir en una y trabajar en la otra sin grandes problemas.
El secreto para ir tan, tan rápido está en una idea que el famoso Elon Musk revivió en 2013: el Hyperloop, que se basa en la idea de quitar el aire de la ruta. Se necesita un medio de transporte que no toque el suelo y que viaje en el vacío, como si estuviera en el espacio.
La protagonista de esta innovación es la empresa valenciana Zeleros. Ellos están creando la versión española del Hyperloop, un sistema de transporte que promete llevar a la gente en cápsulas a velocidades de hasta 1000 kilómetros por hora.
De Valencia a Madrid en tiempo récord
Si te sorprendiste con los transportes solares, debes quedarte a ver esto, pues se trata de la tecnología que conseguirá que el viaje entre Valencia y Madrid sea tan rápido como ir a tomar algo a la cafetería de la esquina.
La tecnología de Zeleros se basa en la idea fundamental de que, si no hay aire, no hay resistencia, y por lo tanto, se puede ir a velocidades extremas usando mucha menos energía. Para lograrlo, el sistema necesita construir tubos gigantes de acero por donde viajará la cápsula.
Dentro de estos tubos se saca casi todo el aire, creando un vacío crucial que es lo que elimina la fricción atmosférica, de manera similar a cómo vuela un avión a gran altura, pero a nivel de tierra, así la cápsula no toca el riel ni el suelo.
Finalmente, una serie de potentes motores eléctricos dan el impulso inicial y mantienen la velocidad, aprovechando al máximo la energía gracias a la falta total de fricción, es un funcionamiento sencillo, pero maravilloso.
Un desafío por resolver
A pesar de su promesa épica, Zeleros reconoce que hay múltiples desafíos que hacen que este proyecto sea tan ambicioso, por eso, aunque el viaje en media hora es el objetivo, su puesta en marcha se espera para cerca del año 2030.
Se necesita lograr una levitación estable y, sobre todo, mantener el vacío a lo largo de cientos de kilómetros de tubos, garantizando una seguridad perfecta a 1000 km/h, así que aun hay un largo camino por recorrer, sobre todo porque la inversión es enorme.
Pero si logran superar los obstáculos técnicos y financieros que han frenado a otros competidores, el impacto será enorme, pues no solo se podrá ir de Valencia a Madrid en media hora, sino que se creará un nuevo estándar de movilidad que es rápido, eléctrico y más eficiente.
Sin duda, el proyecto Hyperloop de Zeleros representa una de las apuestas más arriesgadas e innovadoras de la ingeniería española. Esta tecnología tiene el poder de impulsar un gran cambio regional, haciendo que la distancia y el tiempo, tal como los conocemos, desaparezcan, y colocando a España como un referente tecnológico en el transporte del siglo XXI, justo ahora que están en su mejor momento.















