La campaña de Sea Shepherd Conservation Society arrancó en el verano de 2010, cuando el buque insignia, «Steve Irwin», interceptó y liberó a más de 800 atunes de redes ilegales. Este 19 de junio, Paul Watson, capitán y fundador de la Sea Shepherd, el «Steve Irwin» y el trimarán «Brigitte Bardot, sus dos embarcaciones, permanecerán en el Muelle de España de Barcelona hasta el 5 de julio, cuando partirá para iniciar la segunda campaña en defensa del atún rojo.
La campaña trata de impedir con la acción directa que se lleven a cabo actividades como la pesca con palangre, las redes de deriva y la pesca al cerco, con el objetivo último de evitar la extinción del atún rojo, el más consumido por los japoneses. Una especie, que según ha explicado Watson, está en una situación crítica debido a la explotación permanente a la que es sometida por parte de pesqueros furtivos, que ignoran los tratados internacionales y las leyes.
Watson ha destacado que los países europeos cada vez son más conscientes de la envergadura del problema y de la necesidad de llevar a cabo acciones más eficaces para luchar mejor contra la caza furtiva, aunque ha lamentado que «normalmente, cuando se toman las decisiones la situación ya es muy crítica».
Liderada por Watson, la Sea Shepherd Conservation Society es una organización internacional de acción directa sin ánimo de lucro que lucha por la conservación de la fauna marina y está especializada en intervenciones en contra de la explotación ilegal de la fauna y de los hábitats marinos. Además, cuenta con la ayuda de una fuerza de voluntarios tanto en tierra como en sus embarcaciones.
Paul Watson fundó Sea Shepherd en 1977 y desde entonces ha realizado decenas de campañas oponiéndose a la caza ilegal de ballenas y focas, y a la captura de delfines y tortugas, entre otros. De hecho, organización persigue a aquellos que intentan incumplir los tratados internacionales, las leyes y las regulaciones que protegen a las especies marinas y su entorno.
Cabe destacar que el barco con bandera canadiense de esta ONG, «Farley Mowat» ha sido retenido por las autoridades sudafricanas en el puerto de Ciudad del Cabo, Sudáfrica. Fue detenido cuando atracó dos días después de volver de Japón en una misión para detener a los balleneros nipones. Las autoridades del país han señalado que la detención se ha llevado a cabo por las inadecuadas medidas de seguridad dentro del barco, mientras que la organización ecologista cree que es un truco de Canadá y Sudáfrica, presionados por Japón, para mantener su embarcación lejos de los balleneros japoneses. La tripulación del «Farley Mowat» procede de 12 países distintos.