Los Centros de Recuperación de Fauna son espacios especializados dedicados a la atención, rehabilitación y liberación de animales silvestres que han sido heridos, confiscados o encontrados en situación de peligro. Su principal función es brindar atención veterinaria y cuidados adecuados para que los animales puedan recuperarse física y emocionalmente.
Estos centros trabajan en estrecha colaboración con autoridades ambientales y organizaciones de conservación, asegurando que las especies puedan volver a su hábitat natural en las mejores condiciones posibles.
El ejemplo del Centro de Recuperación de Fauna de Cuenca
El Centro de recuperación de fauna silvestre de Cuenca, ubicado en el Centro de Investigación Agroforestal de Albaladejito, ha atendido en lo que va de año 328 ingresos y ha liberado a 100 animales, por lo que se prevé superar las cifras del ejercicio anterior, cuando devolvió 159 ejemplares al medio natural.
Así se ha puesto de relieve durante una visita al centro de la delegada de la Junta, María Ángeles López, quien ha subrayado que en 2024 se registraron 456 ingresos de fauna silvestre, de los cuales 308 correspondieron a animales vivos, según ha informado la Junta en nota de prensa. Del total, un 93,8 % fueron aves; un 3,6 % mamíferos; y un 2,6 % reptiles, y entre las especies más atendidas figuran el vencejo común, el autillo, el búho real, o el buitre leonado.
Durante su visita, López ha asistido a tareas de atención y alimentación de animales rescatados, así como a los preparativos para la liberación de dos aguiluchos cenizos en el término municipal de Altarejos, una especie catalogada en peligro de extinción. Además, se ha procedido a la suelta de otros dos autillos en las propias instalaciones del centro.
Asimismo, la delegada ha informado sobre el progreso de las obras del futuro Centro de Recuperación de Fauna Silvestre en Fuentenava de Jábaga, que supondrán una inversión de 2 millones de euros procedentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, y que comenzaron el pasado mes de febrero con un plazo de ejecución estimado de entre 12 y 15 meses.
Sin duda todo un ejemplo el que dan estos centros que también cumplen un papel fundamental en la investigación y monitoreo de especies, contribuyendo a las estrategias de conservación y preservación de la biodiversidad. EFE / ECOticias.com