Una nueva planta para tratar envases, biorresiduos y voluminosos para el Ecoparque de la Rioja será una realidad en poco tiempo como parte de las medidas que se incluyen en el Plan de Acción de Economía Circular de La Rioja 2025-2027. El coste de dicha incorporación parte de los fondos regionales y europeos.
De esta manera, esta instalación que se dedica a la gestión integral de residuos urbanos (con clasificación, reciclado y valorización de residuos sólidos urbanos) tendrá esta nueva planta que supondrá una inversión de más de 15 millones de euros.
En este mismo plan se recogen además otra serie de iniciativas como la creación de una plataforma para la gestión digital de los residuos o la consideración de la circularidad para las plantas de biometano para que se pueda dar luz verde a una compatibilidad entre urbanismo y protección del paisaje.
El Plan de Acción de Economía Circular de La Rioja 2025-2027 avanza con nuevas medidas en el Ecoparque de La Rioja
El Ecoparque de La Rioja contará con una nueva planta de clasificación de envases y tratamiento de biorresiduos y voluminosos, cuya inversión prevista alcanza los 15,1 millones de euros, provenientes de fondos regionales y europeos.
Esta es una de las 34 medidas que recoge el Plan de Acción de Economía Circular de La Rioja 2025-2027, del que se ha informado en la reunión del Consejo Asesor de Medio Ambiente, que ha presidido la consejera de Medio Ambiente, Noemí Manzanos.
Entre las medidas que contiene este Plan, también destaca la creación de una plataforma informática para centralizar y digitalizar la información sobre la gestión y control de residuos municipales y comerciales, con un presupuesto de 1,7 millones de euros, ha informado la Consejería en una nota.
El Plan contempla una partida de 20,6 millones de euros, que se destinará a la gestión de residuos, en las que se incluyen las acciones mencionadas y que estarán financiadas con fondos autonómicos, el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), FEDER y FEADER. El Gobierno de La Rioja y entidades vinculadas, como el Consorcio de Aguas y Residuos de la Rioja, abordarán las inversiones para fomentar la transición efectiva hacia un modelo circular.
El Plan también recoge, entre otros aspectos, la consideración de circularidad para las plantas de biometano con el fin, entre otras exigencias, de lograr la compatibilidad urbanística y de conservación del paisaje. Se trata también de que los productos resultantes del proceso -tanto sólidos como líquidos- en estas plantas puedan incorporarse a la agricultura y su gestión garantice un valor agronómico para los suelos, con lo que se evite la emisión difusa de contaminantes y olores.
El Plan prevé también introducir criterios de economía circular en las órdenes de subvenciones y licitaciones públicas, y contempla la integración de la gestión del sustrato postcultivo de champiñón en el plan estratégico.
Este documento responde al compromiso autonómico con un modelo económico descarbonizado, eficiente en el uso de los recursos, competitivo y alineado con los objetivos de sustentabilidad económica y ambiental europeos y nacionales aplicables al territorio. Toma como base jurídica y normativa la Ley 7/2022 de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular, y tiene como punto de referencia la Estrategia ‘España Circular 2030’, además de integrar varios elementos del Plan Director de Residuos de La Rioja 2016-2026.
Zonas vulnerables
La Consejería también sometido a consulta del Consejo Asesor de Medio Ambiente la modificación del Decreto, por el que se declaran 14 zonas vulnerables a la contaminación producida por nitratos procedentes de origen agrario. Manzanos ha explicado que cada tres años la comunidad autónoma debe designar como zonas vulnerables todas las superficies del territorio cuya escorrentía fluya hacia las aguas, y establecer programas de prevención y reducción ante una posible contaminación.
“El 23 de enero de este año se inició la tramitación de la Evaluación Ambiental Estratégica y en este período no se han recibido observaciones. Actualmente, estamos a la espera del informe de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE)”, ha indicado.
El Decreto mantiene las diez zonas vulnerables actuales, de las cuales seis aumentan su superficie, y se crean cuatro nuevas, lo que supone las modificaciones afectan a 18 municipios y se amplían las zonas en cuatro localidades. La modificación también afecta a la aplicación de abonados nitrogenados en terrenos escarpados inclinados.
Así, en el caso de que las pendientes sean superiores al 10% solo se podrá aportar fertilizante orgánico, salvo que se utilicen técnicas que específicamente atiendan la lucha contra la erosión como bancales, terrazas o laboreo de conservación, en los que se podrá aplicar fertilizantes minerales hasta pendientes del 15%. En el caso de que la pendiente supere el 20% solo está permitido aplicar nitrógeno de origen orgánico con un contenido de humedad inferior al 50%. EFE / ECOticias.com