Asimismo, la Dirección General de Industria, Energía y Minas ha llevado a cabo en los últimos años una estrategia de promoción del gas natural ecoeficiente, que se ha basado en cuatro actuaciones: el plan de gasificación de nuevos municipios, el plan de sustitución de combustible en edificios públicos, el plan de gasificación de polígonos industriales y el plan de promoción del gas natural en automoción.
El Plan Energético de la Comunidad de Madrid, que se puso en marcha en el año 2004, ha posibilitado un ahorro del 16 por ciento en el consumo de energía en la región, superando el objetivo inicial del 10 por ciento, según ha informado el Gobierno regional este domingo en un comunicado.
Entre las medidas que han hecho posible este ahorro se encuentran actuaciones formativas y de divulgación, la promoción del Gas Natural como fuente de energía más limpia, los incentivos económicos a ayuntamientos, a empresas y a particulares con los planes renove, así como modificaciones normativas relativas a los certificados de eficiencia energética y los repartidores de costes en instalaciones de calefacción.
Asimismo, la Dirección General de Industria, Energía y Minas ha llevado a cabo en los últimos años una estrategia de promoción del gas natural ecoeficiente, que se ha basado en cuatro actuaciones: el plan de gasificación de nuevos municipios, el plan de sustitución de combustible en edificios públicos, el plan de gasificación de polígonos industriales y el plan de promoción del gas natural en automoción.
Por otra parte, también se han llevado a cabo ayudas económicas a los madrileños que han llevado a cabo alguna actuación de mejora energética se sustenta en pequeños incentivos económicos otorgados a través de los ‘planes renove’, que ya han acumulado más de 700.000 actuaciones, con unas ayudas totales superiores a los 115 millones de euros y una inversión inducida superior a 689 millones. Con ello se ha conseguido un ahorro energético cercano a las 200.000 toneladas equivalentes de petróleo (tep) y una reducción de emisiones cercana un millón de toneladas de CO2.
Además, a través del Plan de Impulso a la Contratación de Empresas de Servicios Energéticos se ha tratado de implicar a los ayuntamientos de la región en la rehabilitación de sus edificios y sus instalaciones de alumbrado público para optimizarlos energéticamente mediante la reforma de su envolvente térmica, instalaciones de climatización e iluminación entre otras.
ACTUACIONES DIVULGATIVAS Y DE FORMACIÓN
Entre las acciones de divulgación se encuentran la campaña ‘Madrid Ahorra con Energía’, dirigida a todos los sectores de la sociedad madrileña, mediante instrumentos tales como la difusión de mensajes en medios de comunicación, la elaboración y difusión de publicaciones, la celebración de jornadas técnicas y congresos, la convocatoria de premios a las mejores instalaciones geotérmicas, entre otras.
En cuanto a actuaciones divulgativas y formativas, sólo durante los últimos tres años, la Comunidad de Madrid ha contado con la colaboración de la Fundación de la Energía de la Comunidad de Madrid para realizar 262 actividades, repartidas en 168 jornadas, 81 cursos, 7 foros y 6 congresos, que han contado con la participación más de 30.000 personas.
CAMBIOS NORMATIVOS Y PROYECTOS PILOTOS
Por otra parte, se han efectuado cambios normativos, con origen europeo y estatal, que han sido desarrolladas por la Comunidad de Madrid para la certificación energética de edificios y también para la eficiencia energética, que establece la obligatoriedad de instalar contadores de consumo individuales que midan el consumo de calor o refrigeración o de agua caliente. El ‘plan renove’ de repartidores de costes de la Comunidad ha sido pionero en fomentar su empleo y adelantar así el cumplimiento de la obligación de la Directiva europea.
Por último, se han llevado a cabo diversos proyectos piloto de ahorro energético, como la rehabilitación energética en el I.E.S. Diego Velázquez, de Torrelodones y en las Escuelas Tecnológicas de Ingeniería de Minas y Energía, que consiste en la adopción, en cuatro de sus aulas, de sistemas eficientes de iluminación, carpintería, aislamiento y optimización de consumos energéticos, al objeto de evaluar los beneficios que actuaciones similares podrán producir en la red de centros educativos de la Comunidad.
Otro ejemplo es el Plan de Ahorro Energético en Metro de Madrid, que contempla medidas como la optimización de la ventilación de los túneles, ajustes de tensión eléctrica o la instalación progresiva de iluminación con tecnología LED.
ep