De toda la población, los niños son los más vulnerables a los contaminantes ambientales. Ya desde el vientre materno, el feto se ve afectado por el medio ambiente a través de la madre. Algunas conductas condicionarán su salud para el resto de la vida.
De hecho, un dato a tener presente es que en los últimos años ha aumentado el número de niños con alergias y enfermedades respiratorias relacionadas con el ambiente: bronquitis, asma, faringitis … La mitad de la población que padece asma son niños, entre un 8% y un 14% de todos los niños. Como ha explicado el director del CREAL Josep M. Antó, ‘la contaminación disminuye la función pulmonar de los niños, y ya no les es posible recuperarla en un futuro’.
Una muestra para saber cómo influye el ambiente en la salud de los niños
La exposición Aire, inaugurada este 14 de octubre en el Cosmocaixa, muestra cómo la calidad del aire influye en la salud respiratoria de los niños. La produce la Fundació Roger Torné con el asesoramiento científico del Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental (CREAL) y el apoyo de la Fundación la Caixa. Ha sido realizada, por ERF. Gestión y Comunicación Ambiental. Y ha sido comisariada por el ecólogo Ramon Folch.
«Aire: Respiración y salud infantil» es una exposición interactiva y didáctica. La muestra ha sido concebida para ofrecer, a través de cuánto espacio (vientre materno, casa, escuela y calle), información de calidad respecto de los riesgos y las consecuencias de las agresiones ambientales y las posibles medidas de prevención. También se quiere favorecer una toma de conciencia sobre la necesidad de un avance en la salud ambiental pediátrica. Aunque los datos impactantes que se dan a conocer, no tiene un tono alarmista, sino lúdico, y pone el énfasis en la prevención, invitando a los niños y las familias a participar en la exposición.
Así, sabemos que por cada cigarrillo fumado durante el embarazo, el recién nacido pesará 25 gramos menos. También le afectan el estrés de la madre (aumenta el riesgo de parto prematuro) y la contaminación atmosférica. Más datos: los motores diesel contaminan más que los de gasolina, los productos de limpieza también perjudican la salud respiratoria, sólo un 42% de ciudades del estado español cumple la recomendación de la OMS de tener 15 m2 de zona verde por habitante . De hecho, la Comisión Europea tiene previsto sancionar económicamente el estado español porque sobrepasa los niveles de contaminación en muchas ciudades.
Aunque es prácticamente imposible escapar de la contaminación atmosférica, podemos mejorar la salud respiratoria con algunos hábitos, según ha dicho Soledad Román, directora de la Fundación Roger Torné. El ejercicio físico es útil para mejorar la función pulmonar, por eso es muy recomendable que hagan los niños afectados de enfermedades respiratorias. Otra conducta básica es aprender a respirar. En este sentido, la Fundación organiza actividades para educar a los niños con dos proyectos que se hacen en el Montseny: Respiro y Airea, que combina la educación sobre salud con el contacto con la naturaleza.
La exposición viene acompañada de actividades paralelas, como unas jornadas que estudiarán la relación entre cambio climático y salud infantil, una línea de investigación que conduce el científico del CREAL Jordi Sunyer. Se harán el 11 y 12 de noviembre en el Cosmocaixa. Entre enero y mayo se realizarán talleres sobre respiración y prevención de enfermedades respiratorias infantiles.