Santander implantará tecnología led en sus más de 22.600 luminarias, un proyecto «ambicioso» para el que el Ayuntamiento está ultimando el pliego de condiciones y que se tramitará en el mes de julio.
El Paseo de la Segunda Playa del Sardinero acoge una experiencia piloto de luminarias con detección de movimiento
Santander implantará tecnología led en sus más de 22.600 luminarias, un proyecto «ambicioso» para el que el Ayuntamiento está ultimando el pliego de condiciones y que se tramitará en el mes de julio.
Se estima que esta renovación de la iluminación tendrá un coste superior a los 13,5 millones de euros, cuantía que invertirá la empresa que resulte adjudicataria del concurso y que amortizará en unos 10 años a través de los ahorros que se alcancen.
Así lo ha anunciado este jueves el alcalde de Santander, Iñigo de la Serna, durante la presentación de un experiencia piloto de luminarias con detección de movimiento que se ha instalado en el Paseo de la Segunda Playa del Sardinero.
De la Serna ha indicado que la implantación de la tecnología led en las luminarias supondrá un ahorro «del 70 por ciento como mínimo». Actualmente, el coste del alumbrado público es de 2,5 millones de euros anuales, que suponen el 52% del coste total que el Ayuntamiento tiene en energía (unos 5 millones).
El Ayuntamiento ha decidido abordar este «ambicioso e inédito» proyecto tras realizar auditorías energéticas de «cada uno de los puntos de luz de la ciudad» –tanto del alumbrado público como de los edificios municipales–, algo que ha realizado dentro los proyectos de smart city y a través de un fondo del Banco Europeo de Inversiones (BEI).
Aunque el pliego de condiciones del concurso para llevar a cabo este proyecto aún se está ultimando, el alcalde ha detallado que incluirá el cambio del 100% de las luminarias por tecnología led y la implantación de un sistema que permita realizar una «telegestión» de las mismas, de forma que se puedan controlar «una a una» y se pueda regular su intensidad dependiendo de las zonas.
El contrato primará «la calidad tecnológica por encima de otras cosas» y planteará la realización de una revisión anual de los ahorros que se van produciendo, ya que la empresa adjudicataria amortizará la inversión en función de éstos.
«La inversión no la hará el Ayuntamiento sino la empresa adjudicataria del concurso público y tendrá un periodo de amortización que estimamos será superior a los 10 años. Con el ahorro que se consiga se amortizará la inversión e incluso el Ayuntamiento podría llegar a tener algún beneficio adicional si el ahorro es mayor», ha señalado De la Serna.
EXPERIENCIA PILOTO
Por otro lado, el alcalde ha presentado la experiencia piloto de luminarias con detección de movimiento, una tecnología a la que también «se dejará la puerta abierta» para su instalación en otras zonas dentro del pliego para la renovación integral.
En concreto, la empresa DITRA, actual adjudicataria del servicio de alumbrado municipal, ha sustituido un total de 20 luminarias del Paseo de la Segunda Playa del Sardinero con una inversión de unos 30.000 euros.
De la Serna ha indicado que, con esta experiencia, se puede probar lo que «podría llegar a ser» el nuevo sistema de alumbrado y los ciudadanos puedan «ver y comprobar» lo que supondrá la introducción de la tecnología led o los sensores de movimiento en la iluminación pública.
Los detectores de movimiento de estas luminarias, que disponen de sensores ópticos y tienen una comunicación inalámbrica wifi entre sí, modifican la intensidad de la iluminación al detectar personas o ciclistas que circulen a una velocidad inferior a los 30 kilómetros por hora.
El alcalde ha destacado que disponen de un «sistema absolutamente flexible y programable», ya que permiten regular el nivel de intensidad lumínica desde el 20 al 100 por ciento, así como el tiempo de retardo –el que transcurre desde que pasa una persona hasta que se vuelve a bajar la intensidad–.
Además, estas nuevas luminarias reducen las emisiones de CO2 y tienen una base de perfil plano para evitar la contaminación lumínica. De la Serna ha apuntado también que las luminarias están diseñadas con materiales reciclables y su carcasa está recubierta de una pintura especial para protegerlas de las inclemencias del tiempo.
Estas luminarias tienen una potencia de 102 vatios frente a los 250 de las anteriores, consiguen un ahorro del superior al 60 por ciento con la potencia pero éste puede incrementarse hasta el 75% con la regulación de la intensidad lumínica.
Anteriormente ya se hizo otra experiencia piloto en el Parque de Las Llamas donde, a través del proyecto OutSmart, se instalaron lámparas de vapor de sodio que también regulaban la intensidad pero el ahorro era menor.
ep