¿Cómo conseguir un crecimiento verde real si eres un país rico? Un estudio recientemente publicado alerta de que el crecimiento de los países ricos no es real. Al ritmo actual, a estas naciones les tomaría, en promedio, más de 200 años lograr que sus emisiones se acerquen a cero. Y emitirían más de 27 veces su parte justa del presupuesto global de carbono para 1,5 °C.
¿Se puede hacer algo?
Los autores sugieren una serie de medidas que los responsables de la formulación de políticas pueden tomar para acelerar la reducción de emisiones de manera justa y socialmente beneficiosa:
- Alejarse del crecimiento económico como objetivo central. Y, en cambio, priorizar la sostenibilidad ecológica, el bienestar y la justicia como objetivos de desarrollo.
- Reducir las desigualdades en ingresos y riqueza (por ejemplo, mediante impuestos sobre el patrimonio y umbrales máximos de ingresos).
- Reducir las formas de producción y consumo innecesarias y que generan grandes emisiones de CO2 (por ejemplo, los vehículos todoterreno, los viajes aéreos, la industria cárnica y láctea, la moda rápida, los cruceros, las mansiones y los jets privados).
- Aislar edificios y reutilizar edificios para minimizar las nuevas construcciones.
- Reducir el desperdicio de alimentos y cambiar a técnicas agrícolas agroecológicas y a dietas predominantemente basadas en plantas.
- Introducir leyes para alargar la vida útil de los productos y garantizar los derechos de reparación.
- Alejarse de los coches privados y mejorar el transporte público, los sistemas de bicicletas y la accesibilidad para peatones.

Todavía estamos a tiempo
El autor principal, Jefim Vogel, explica qué. “Alejarse del crecimiento económico hacia el poscrecimiento es fundamentalmente diferente de una recesión. No implica dificultades ni pérdida de medios de vida.
El poscrecimiento puede asegurar y mejorar los medios de vida y el bienestar sin crecimiento económico, a través de políticas como la garantía de empleo público, la reducción del tiempo de trabajo, salarios dignos, una garantía de ingreso mínimo y el acceso universal a viviendas asequibles y servicios públicos de calidad”.
El profesor Jason Hickel, coautor del estudio, concluye: “Los devastadores extremos climáticos de este año son una terrible advertencia de hacia dónde nos dirigimos. Si queremos evitar un colapso climático aún más catastrófico, los países de altos ingresos necesitan urgentemente aplicar enfoques de poscrecimiento que reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero. Y al mismo tiempo mejoren el bienestar y la justicia”.
Apoyo a los países vulnerables
A diferencia de los países de altos ingresos, los autores señalan que las naciones de bajos ingresos tienen menores emisiones per cápita. Lo que les hace más factible mantenerse dentro de las partes justas de su presupuesto de carbono. Incluso mientras aumentan su producción y consumo para objetivos de desarrollo humano.
Países como Uruguay y México ya están dando pasos en esta dirección. Con suficiente acceso a financiación y tecnología. Y una estrategia de desarrollo centrada en las necesidades humanas, los países de bajos ingresos deberían poder mantenerse dentro de las cuotas justas de sus presupuestos de carbono. Al mismo tiempo que consiguen aumentar la producción y el consumo a los niveles necesarios para lograr niveles de vida dignos para todos.
Limitaciones del estudio
Los autores señalan algunas limitaciones de su estudio. Los datos no incluyen las emisiones de la agricultura, la silvicultura y el uso de la tierra, ni las emisiones de la aviación y el transporte marítimo internacionales. Si se incluyeran, los países de altos ingresos necesitarían reducir sus emisiones aún más rápido para cumplir con el Acuerdo de París.
También señalan que su enfoque de distribuir “partes justas” del presupuesto global de carbono restante a los países en proporción al tamaño de su población debe considerarse una interpretación mínima de los principios de equidad establecidos en el Acuerdo de París.
Porque este enfoque no afecta directamente, explican, a la desigualdad histórica en las emisiones (que, según los autores, debe compensarse de otras maneras). Sin embargo, interpretaciones más estrictas de la justicia darían como resultado menores proporciones del presupuesto de carbono para los países de altos ingresos. ¿Cómo conseguir un crecimiento verde real si eres un país rico?
Referencia: artículo publicado en The Lancet Planetary Health.


















