Tras dos años de desarrollo, Kinze ha creado una serie de tractores que no necesitan conductor. Están equipados con tecnología de detección de obstáculos que les permite evitar verjas, postes, animales de granja y otros vehículos. Además, los vehículos pueden tomar decisiones operacionales en función de las condiciones del terreno.
La idea es que estos vehículos puedan trabajar, por ejemplo, de noche. Además, puede realizar varias tareas, como plantar, nutrir, mantener y recoger las cosechas”.
La tecnología utilizada no es nueva, según explica la propia compañía, sino que lleva usándose desde la década de los noventa en diversas industrias como la minería, la construcción o el ámbito militar. Sin embargo, es la primera vez que se utiliza en este ámbito.