Los antioxidantes son nutrientes como las vitaminas C o E, los flavonoides y los carotenos, entre otros, que están presentes en los alimentos y ayudan a proteger las células del daño causado diariamente por los radicales libres promovido por la oxidación de la grasa a nivel corporal.
Su presencia es fundamental no solo porque activan las propiedades organolépticas naturales de los alimentos, preservándolos, sino porque al ser ingeridos protegen la salud del consumidor de manera amplia y eficaz, previniendo el desarrollo de enfermedades tan graves como el infarto de miocardio, el cáncer, el ictus, los procesos neurodegenerativos, etc.
Los antioxidantes son sustancias presentes en infinidad de alimentos. Los radicales libres son moléculas que diariamente se generan dentro del organismo y que son el resultado de las diversas reacciones del tipo biológico que se producen a nivel celular. El exceso de radicales libres se ve favorecido por la inflamación corporal, el consumo de alcohol y tabaco, la contaminación ambiental, el estrés o la alimentación inadecuada (comidas procesadas, grasas, aditivos químicos, azúcares).
El estrés oxidativo causado por la acción de los radicales libres sobrantes puede conducir al debilitamiento del sistema inmunológico, acelera los procesos relacionados con el envejecimiento e influye en el desarrollo de patologías tales como: aterosclerosis, cataratas, diabetes, hipertensión, afecciones cardíacas, enfermedades neoplásicas y neurodegenerativas.
Los antioxidantes son los agentes encargados de neutralizar la sobreproducción de radicales libres. El cuerpo genera radicales libres y algunos antioxidantes durante toda la vida, pero a medida que transcurre el tiempo, la capacidad de producción de antioxidantes decrece y es necesario compensar las dosis necesarias, recurriendo a un aporte externo de los mismos.
Antioxidantes: betacaroteno o pro Vitamina A
Es el pigmento responsable de dar color a muchas frutas y verduras (amarillas, naranjas y de hojas verdes). Tiene la capacidad de transformarse en Vitamina A si el cuerpo lo requiere. Esta Vitamina interviene en la producción de melanina, una sustancia que protege naturalmente a la piel de los rayos del Sol. Los alimentos que las aportan son: zanahorias, tomates, pimientos, brócoli ecológico y espinacas.
Antioxidantes: Vitamina E
La vitamina E estimula positivamente el sistema inmunitario, interviene en los procesos de interrelación celular, es vasodilatadora, tiene efectos anticoagulantes y es uno de los más poderosos antioxidantes. El aguacate, las espinacas, el brócoli, los espárragos y las almendras son alimentos con alto contenido de vitamina E.
Antioxidantes: vitamina C
También llamada ácido ascórbico, la vitamina C es fundamental para el buen funcionamiento de todo el cuerpo, ya que refuerza el sistema inmunitario e interviene en multitud de funciones como la cicatrización de heridas, la digestión, la prevención de algunos cánceres y la diabetes o los resfriados, entre otras. Se encuentra en los kiwis, el brócoli, las fresas y los tomates.
Antioxidantes: flavonoides
Los flavonoides son fitonutrientes (que solo contienen los vegetales) que intervienen en la protección del cuerpo contra agentes dañinos externos con efecto oxidante, como los rayos UV, la contaminación medioambiental y las sustancias perniciosas presentes en alimentos, cosméticos limpiadores, etc. Alimentos como las uvas, el té verde, los arándanos, las espinacas o las fresas son buenas fuentes de estos antioxidantes.