El huracán de categoría 6 parecía hipotético, pero los expertos han emitido un triste pronóstico que tiene al mundo en vilo. Mientras el Milton destruye todo a su paso, surge la gran pregunta entre los ciudadanos/as: ¿la humanidad está preparada para fenómenos de categoría 6? Con huracanes con capacidad para escalar de la categoría 1 a la 5 en menos de 24 horas, no resulta extraño que este interrogante aparezca en la mente colectiva.
La escala Saffir-Simpson clasifica la intensidad de los huracanes en 5 categoría basadas en la velocidad del viento y el daño potencial. Que el huracán alcance la categoría 5, la más alta, supone vientos que superan los 252 km/h. A este nivel, estos vientos tienen capacidad para causar auténticas tragedias, incluyendo la destrucción de edificios y perjudicando diferentes infraestructuras.
Algunos fenómenos recientes han registrado vientos todavía más fuertes, lo que ha suscitado a considerar la existencia de situaciones de alarma de categoría 6. En este contexto, los expertos han emitido un triste pronóstico.
¿Qué dicen los expertos sobre el huracán de categoría 6?
Un estudio publicado en la prestigiosa revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) propone adaptar la escala que mide la intensidad de los huracanes para tener presentes las tormentas más potentes. Lleva la firma de Michael F. Wehner, científico principal del Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley, y James P. Kossin, distinguido asesor científico de la First Street Foundation, y la edición de Kerry Emanuel, Massachusetts Institute of Technology, New Harbor. Sugiere añadir la categoría 6.
El fenómeno de categoría 5 equivale a una tormenta con vientos de 252 km/h o más. La nueva escala limitaría las tormentas de categoría 5 a vientos sostenidos de hasta 308 km/h y cualquier valor superior a estos números pasaría a ser un huracán de categoría 6. Los autores del análisis argumentaron que, conforme el cambio climático genera un incremento vertiginoso de las temperaturas de los océanos, la intensidad potencial de los vientos de los huracanes está subiendo.
Cabe destacar que los vientos de los huracanes también reciben la denominación de ciclones tropicales o tifones en océanos fuera del Atlántico y el Pacífico Oriental. De hecho, de los 197 ciclones tropicales a nivel global que registraron la categoría 5 entre 1980 y 2021, 5 sobrepasaron el umbral hipotético de categoría 6. Los 5 tuvieron lugar desde 2013, tomando en cuenta el huracán Patricia de 2015, que asoló México, y el súper tifón Haiyan, que derribó Filipinas en 2013.
La idea de añadir una categoría 6 a la escala no es un concepto nuevo, sino que lleva años en discusión. El parámetro Saffir-Simpson tiene su origen a principios de la década de 1970 y tiene sus limitaciones. Tan solo es una escala de viento y no incluye los impactos de las marejadas ciclónicas y las inundaciones inducidas por la lluvia.
Reclaman la inclusión de una categoría 6 para medir la intensidad del huracán
A medida que el planeta se caliente, el impacto de los huracanes es más peligroso. Un incremento del nivel del mar de solo un par de pulgadas puede marcar una diferencia considerable en la distancia a la que pueden llegar las marejadas ciclónicas tierra adentro, y un clima más cálido también. Esto quiere decir que existirá una mayor cantidad de agua disponible en la atmósfera que potencialmente caerá en forma de lluvia.
El aumento de las categorías del huracán aún está en discusión, ya que algunos expertos argumentan que una nueva clasificación podría desviar la atención del verdadero peligro, dado que hay zonas como Estados Unidos en las que 90% de los fallecimientos relacionados con huracanes tienen que ver con marejadas ciclónicas e inundaciones. Un dato que reivindica el hecho de que los terremotos y huracanes ponen el riesgo al 10% de las especies del planeta.