Un centenar de líderes locales y regionales de Estados Unidos han confirmado su asistencia a la COP30, la próxima cumbre climática de las Naciones Unidas que se celebrará en 2025 en Belém, Brasil. Su participación cobra especial relevancia ante la ausencia del Gobierno Federal de Donald Trump, quien, tras su regreso a la Casa Blanca, ha reiterado su escepticismo frente a las políticas de mitigación del cambio climático.
Ante esta retirada federal, gobernadores, alcaldes y representantes estatales de diferentes regiones estadounidenses buscan demostrar al mundo que el país sigue teniendo sectores comprometidos con la acción climática. Su presencia en la COP30 pretende enviar un mensaje claro: Estados Unidos no es monolítico en su postura climática y muchas de sus comunidades continúan avanzando hacia una economía baja en carbono.
Los líderes locales también aprovecharán la cumbre para establecer alianzas internacionales, intercambiar experiencias sobre energías renovables y promover inversiones en infraestructura verde.
La única representación norteamericana en la COP30
Más de un centenar de líderes locales de Estados Unidos -entre ellos gobernadores, alcaldes y altos funcionarios estatales- participarán en la COP30, que se celebrará del 10 al 21 de noviembre en Belém (Brasil), en contraste con el que consideran un «vacío» del Gobierno Trump en materia climática.
Los líderes estadounidenses buscarán reafirmar su compromiso con los objetivos del Acuerdo de París y compartir soluciones locales que están «reduciendo los costos de energía, creando empleos y disminuyendo la contaminación» en Estados Unidos, detallaron en un comunicado.
Esta delegación estadounidense incluirá representantes de 26 estados: gobernadores, más de una docena de altos funcionarios de seis estados miembros de la U.S. Climate Alliance, más de 35 alcaldes y 50 funcionarios municipales.
La delegación estará encabezada por los gobernadores de Wisconsin, Tony Evers, y Nuevo México, Michelle Lujan Grisham, quienes son los copresidentes de la U.S. Climate Alliance. Esta organización junto con America Is All In y Climate Mayors informaron que la delegación acudirá también al Foro de Líderes Locales de la COP30 y la Cumbre Mundial de Alcaldes C40.
Igualmente asistirán la copresidenta de America Is All In, Gina McCarthy, y la alcaldesa de Phoenix, Kate Gallego, quien preside Climate Mayors y es vicepresidenta de C40 Cities.
«El liderazgo de los estados y territorios de la Alianza ha sido durante mucho tiempo un laboratorio para las soluciones climáticas más innovadoras e impactantes del mundo, declaró Evers. «Esperamos catalizar una asociación aún más profunda en Brasil, donde dejaremos claro que, sin importar los obstáculos, seguimos avanzando», añadió.
McCarthy señaló que ante la falta de acción del gobierno federal, son los gobiernos locales los que están tomando la iniciativa. «Estamos decididos a cumplir las promesas que hicimos al pueblo estadounidense y a nuestros socios internacionales», afirmó.
Ciudades, motores climáticos
La alcaldesa de Phoenix, Kate Gallego, destacó el papel de las ciudades como motores de la acción climática. Las localidades «siempre han estado a la vanguardia de la innovación y la acción climática. Los alcaldes de todo el país redoblamos esfuerzos para llenar el vacío de liderazgo a nivel federal», subrayó.
Abundó que la idea es impulsar soluciones pragmáticas que ofrecen beneficios inmediatos: reducir las facturas de energía, proteger el acceso al agua y garantizar que nuestros vecindarios estén a salvo de los fenómenos meteorológicos extremos«, dijo.
La delegación presentará en Río de Janeiro el informe anual 2025 de la U.S. Climate Alliance y acudirá a un encuentro de alcaldes estadounidenses el 4 de noviembre, como también a una sesión sobre liderazgo climático subnacional en Belém.
El anuncio se produce una semana después de que una delegación de grupos estadounidenses se reuniera con el presidente de la COP30, el embajador André Corrêa do Lago, y la directora ejecutiva Ana Toni, para reiterar el compromiso de cooperación global en materia climática y mostrar los avances logrados en territorio estadounidense.
Se espera que presenten proyectos concretos de movilidad sostenible, gestión del agua y resiliencia urbana, en línea con los objetivos del Acuerdo de París. La ausencia de la delegación federal, sin embargo, marcará un contraste notable en el panorama diplomático.
Mientras otros países refuerzan sus compromisos climáticos, la administración Trump insiste en priorizar la industria fósil y desmantelar regulaciones ambientales. En este contexto, la participación activa de los gobiernos locales reafirma el papel crucial de las ciudades en la lucha global contra el cambio climático, mostrando que la acción climática puede —y debe— surgir desde el nivel más cercano a la ciudadanía. EFE / ECOticias.com
 
			 
			















