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lunes, junio 5, 2023

Renovables en Cataluña: mucho por hacer

Fuimos los primeros en instalar un parque eólico en España, pero ahora Cataluña es la novena comunidad autónoma en potencia instalada (420,44MW). Frente a los 108 parques eólicos de Castilla La Mancha, los 149 de Castilla León o los 142 de Galicia, Cataluña solo cuenta con 18. Tampoco estamos muy bien posicionados en cuanto al aprovechamiento de la energía fotovoltaica, siendo la séptima comunidad autónoma en potencia instalada (170MW).

En Cataluña, la penetración de las energías renovables, con la eólica y la fotovoltaica a la cabeza, no se corresponde con el potencial técnico e industrial ni con la larga tradición de innovación tecnológica de nuestro país. Mientras que en el conjunto del estado español las energías renovables representan un 6,9% del consumo total de energía primaria, en Cataluña solo llegan a un 2,8%. Si contabilizamos la proporción del suministro eléctrico generado con energías renovables, Cataluña de nuevo se queda atrás, con un 10,3% frente al 20% a total estatal (todas las cifras son del año 2007).

 

Es evidente que al sector de las renovables en Cataluña solo le queda crecer en los próximos años. El propio Pla de l’Energia de Cataluña 2006-15, en su escenario Intensivo en Eficiencia energética y energías Renovables (IER), prevé un crecimiento de la aportación de energía renovable significativo, aunque tímido según algunos sectores. Así, las renovables pasarían del 2,8% de la energía primaria actual a un 9,5% en 2015, mientras que si medimos la participación renovable en el suministro eléctrico, esta pasaría del 10,3% actual a un 20,8%.

‘La penetración de las energías renovables no se corresponde con el potencial técnico e industrial ni con la larga tradición de innovación tecnológica de Cataluña’

Una de las medidas encaminadas a fomentar esta evolución se ha presentado recientemente, en forma de un nuevo decreto regulador de la tramitación de parques eólicos y fotovoltaicos. El objetivo de este decreto es simplificar el trámite de autorización y que la extensión de estas tecnología de captación energética sea más racional. Los parques eólicos se deberían beneficiar ahora de la creación de Zonas de Desarrollo Prioritario (ZDP), que serían los espacios óptimos para su ubicación. Estas zonas dispondrán de la capacidad necesaria para evacuar la electricidad producida (uno de los frenos a la expansión eólica en Cataluña), y mayor seguridad en la calificación ambiental y urbanística. Los promotores podrán presentarse a concursos públicos para cada ZDP, y la decisión final la tomarán los municipios afectados y la Generalitat, mientras que la Dirección General de Energía y Minas actuará como órgano interlocutor.

 

En lo que respecta a la energía solar fotovoltaica, su expansión se beneficiará ahora de nuevas condiciones para los potenciales emplazamientos. Se podrán instalar en suelo no urbanizable contiguo a terrenos industriales (con una superficie máxima de 6 hectáreas y una distancia mínima entre instalaciones de 500 metros), y equipamientos agrícolas y ganaderos. También se podrán ubicar junto a otro tipo de edificaciones de una superficie mayor de 150 metros cuadrados o con conexiones de servicios (electricidad y agua corriente), en cuyo caso no podrán pasar de las 3ha. Destaca en este apartado que se podrán instalar parques fotovoltaicos en terrenos gravemente degradados por actividades anteriores y que no hayan sido restaurados, siempre que la instalación del parque no beneficie a los responsables de la degradación.

 

Si las inversiones son posibles y las regulaciones no son un estorbo sin sentido, las energías renovables en Cataluña deberían experimentar una expansión notable en el futuro. En el caso de los grandes parques fotovoltaicos y eólicos, hay que superar además la fuerte desconfianza que estos generan entre algunos colectivos conservacionistas y ecologistas catalanes. Este es un asunto complejo en el que influye no solamente la realidad del mapa renovable catalán (especialmente el eólico), sino también una dinámica derivada del reparto de la población sobre el territorio y el peso que algunas comarcas han debido soportar a la hora de acoger instalaciones de producción energética.

 

 

 

Daniel Gómez Cañete

Activista y divulgador ambiental | crisisenergetica.org

 

Sosotenible.cat

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