España tendrá su biocombustible con agua muy pronto. Se avecina una energía verde que mitigará las emisiones contaminantes. Diferentes partes del mundo ya apuesta por energías renovables para desvincularse de los combustibles fósiles. La lucha contra el cambio climático y la disminución de emisiones contaminantes es latente. De hecho, aunque se está prestando especial atención a la búsqueda de alternativas en el campo de la movilidad, la descarbonización acapara prácticamente todas las industrias.
Esto lleva a la humanidad a la necesidad de nuevos combustibles que fomenten la sostenibilidad, brindando soluciones más respetuosas con el medio ambiente y prometa un menor impacto en el calentamiento global. La transición hacia una nueva realidad sostenible acarrea importantes cambios técnicos, políticas y marcos regulatorios.
Asimismo, ya se habla del establecimiento de incentivos y técnicas que faciliten la adopción de combustibles limpios, como créditos fiscales, exenciones de impuestos o programas de subvenciones. La transición hacia un escenario más sostenible requiere de un esfuerzo coordinado entre el sector público y privado.
Hidrógeno verde: el biocombustible por el que apuesta España y resuena en todo el mundo
En este marco de cambio y ecología, el hidrógeno verde se perfila como uno de los protagonistas de la transición energética. España lo sabe y por eso ha decidido apostar por él. La Comunidad de Madrid albergará la primera planta de hidrógeno verde de España a partir de agua regenerada, en lugar de potable.
El consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior de la Comunidad de Madrid, Carlos Novillo, visitó en Pinto la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Arroyo Culebro Cuenca Media Alta, espacio que se convertirá en la localización de esta infraestructura impulsada por la compañía pública Canal de Isabel II. “Con esta iniciativa Canal de Isabel II se coloca de nuevo en la vanguardia al promover la creación de esta planta que será único en nuestro país, ya que, además de utilizar agua regenerada, obtendrá toda la energía necesaria para su funcionamiento de la propia depuradora”, señaló Novillo.
La nueva planta de H se abastecería a partir de las placas solares instaladas en la EDAR y de la cogeneración de biogás proveniente del aprovechamiento de residuos. La estimación es que, en total podrá generar unos 400 kilos de hidrógeno al día, un número equivalente a las que necesitaría un vehículo propulsado por este elemento para transitar 40.000 kilómetros por carretera.
Con el desempeño de esta iniciativa, los expertos de Canal de Isabel II podrán contrastar las posibles aplicaciones del hidrógeno en materia de movilidad sostenible, la electrificación del transporte pesado y la descarbonización en diferentes procesos industriales. Las obras comenzaron el pasado mes de agosto y se prevé que terminen en 8 meses. Disponen de una inversión por parte del Ejecutivo de 6,03 millones de euros, financiados por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional.
España ve el futuro colmado de hidrógeno verde, el biocombustible de agua que llega para quedarse
“Lo que se quiere también, desde el punto de vista experimental, es mostrar cómo el agua puede tener incluso una cuarta vida. No solo nos da de beber y riega nuestros campos, también ese agua regenerada sirve para la industria. Este es un paso más, quitándole esa molécula de hidrógeno que nos va a aportar esos 400 kilos de hidrógeno al día, que van a poder ser utilizados no sólo en el transporte colectivo”, explicó el funcionario.
Concretamente, ya se ha alcanzado un acuerdo con la compañía para que el 40% de esa producción puede llegar al transporte pesado, “pero también la industria va a necesitar ese proceso de descarbonización”.
El ingeniero agrónomo tiene claro que el futuro es el hidrógeno y así lo expresó frente a la prensa. “Nosotros aplicamos la neutralidad tecnológica, apostamos por todas las alternativas que nos da la ciencia y en este caso agradecer a los técnicos del canal como una vez más han dado un paso adelante en la innovación y en ser pioneros en algo que la sociedad demanda, buscar alternativas a los combustibles fósiles y esta va a ser una de las más importantes, la producción de hidrógeno verde que evidentemente no genera ningún tipo de impacto medioambiental”, señaló.
España tendrá así su biocombustible con agua, una energía verde que enfrentará la contaminación que tanto ha aquejado hasta ahora. Mientras tanto, van llegando las licitaciones para la producción y el almacenamiento de hidrógeno verde.