La energía renovable está en auge debido a la alta huella ambiental que dejan los combustibles fósiles. Aunque ha mostrado un rendimiento óptimo durante años, el mundo busca desesperadamente alternativas que puedan sustituirlos. El impulso hacia las renovables es uno de los grandes avances del ser humano en su lucha contra el cambio climático.
En 2024, el planeta produjo más del 40% de su electricidad a partir de fuentes bajas en carbono, según advierte un estudio del think tank sobre energías limpias Ember. Este es un récord considerable que no lograba superarse desde la década de 1940.
Ese año el sistema eléctrico global era 50 veces más pequeño que el actual y las funciones pesadas recaían sobre la energía hidroeléctrica. Ahora es la energía solar la que tiene el rol protagonista en la carrera por instalar un sistema eléctrico 100% limpio.
Según el último informe Global Electricity Review de Ember, la producción global de energía solar es suficiente para brindar abastecimiento a toda India. “Europa se ha consolidado como líder mundial en energía limpia”, dijo ante Euronews Green Beatrice Petrovich, analista de Ember.
Sumado a esto, “está mostrando al mundo cómo aumentar la proporción de renovables en el mix”, con prácticamente la mitad (47%) de energía solar, eólica e hidráulica en 2024.
La energía renovable presenta un grave problema: sus residuos
Aunque el uso de la energía renovable suele asociarse con escenarios positivos y limpios, presenta un grave problema que requiere de atención inmediata: los residuos generados al final de su vida útil. Estos van acumulándose conforme la tecnología se supera a sí misma.
Un estudio reciente proveniente del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas señala que España se encuentra entre los territorios de la UE que más residuos fotovoltaicos creará.
Este contexto requiere una planificación cuidadosa y la instauración de políticas que impulsen el reciclaje y la valorización de los materiales que componen los paneles solares. Bajo este marco, España tiene un plan para salvar los paneles solares de la destrucción.
¿Qué dice la ley sobre los residuos de esta energía renovable?
La Directiva 2012/19/UE sobre residuos de aparatos eléctricos y electrónicos estipula las condiciones para gestionar los paneles solares al final de su ciclo útil. Reclama a los estados miembros que fijen sistemas de recogida y reciclaje, además de determinar objetivos de recogida y valorización.
Sin embargo, no menciona requisitos específicos que puedan aplicarse sobre los paneles solares, aspecto que ha suscitado cierta incertidumbre en el sector. Para aclarar este contexto, la Comisión Europea hizo pública una guía sobre el tema.
Determinó que los paneles solares dependen de los requisitos de la directiva. Además, la guía brinda orientaciones respecto a la categorización, requisitos de recogida y tratamiento y metas de valorización. España ha transpuesto la directiva con el Real Decreto 110/2015.
No obstante, al igual que sucede con la directiva de Europa, su real decreto no recoge requisitos específicos para esta energía renovable. Con el fin de llevar claridad al sector, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico se encuentra trabajando en una estrategia para gestionar correctamente esta situación.
La solar no es la única energía renovable que genera residuos
Los residuos generados por las palas de aerogeneradores que alcanzan el final de su vida útil también suponen un problema para el sector energético. Estas piezas están compuestas de materiales ultrarresistentes y de difícil tratamiento, por lo que podrían llegar a tardar siglos en descomponerse.
Pese a que ninguna de las opciones de reciclaje existentes ha logrado la escala y eficiencia necesarias para abordar el problema, ya existen proyectos que buscan revertir lo que está pasando con los residuos de esta energía renovable.
Por ejemplo, en Europa, el consorcio ZEBRA (Zero Waste Blade Research) ha creado prototipos de palas 100% reciclables, mientras que DecomBlades prepara estrategias para desmontar y reciclar a gran escala.
El lado oscuro de la energía renovable es la fila de residuos que deja cuando su tecnología alcanza su vida útil. Nadie lo habla, pero podría ahogar el planeta si no se halla una solución pronto. Mientras los expertos tratan de descifrar cómo solucionar el mayor inconveniente de la energía renovable, España apuesta por el revamping.