Parece que la guerra en la industria automotriz no es la única contienda conocida, pues ahora Europa se prepara para luchar con China, pero esta vez no será por coches sino por recursos naturales que son muy valiosos y que todos quieren tener.
Los recursos más valiosos
Desde tiempos inmemorables, el ser humano ha buscado obtener recursos de la naturaleza, pero con el paso del tiempo, cada vez queremos más, pues esos recursos son necesarios para prácticamente cualquier desarrollo tecnológico
Y aunque hoy en día existen muchos procesos para extraer recursos, hay algunos que siguen siendo muy difíciles de obtener y son las famosas tierras raras. Estas son un conjunto de por lo menos 17 elementos químicos que no se encuentran en estado puro en la naturaleza.
Por lo tanto, para obtener estos recursos se debe recurrir a procesos complejos y costosos, a pesar de que todos los países los quieren, especialmente los países europeos que están buscando reducir su dependencia de China.
Actualmente China es el país con mayor cantidad de reservas de tierras raras en el mundo y también es el principal exportador que le entrega estos valiosos recursos a los países europeos, pero esta situación podría acabar ya que la Unión Europea (UE) se ha propuesto un nuevo desafío.
Europa quiere despedirse de China
Sucede que la Unión Europea está trabajando en varios proyectos para reducir su dependencia de potencias como China sobre materias primas necesarias para la transición ecológica, la digitalización o defensa, tales como el litio, el níquel y el titanio.
De acuerdo con la nueva Ley de Materias Primas Fundamentales, la Unión Europea tiene el objetivo de satisfacer el 10 % de sus necesidades anuales de materias primas mediante la extracción de minerales, el 40 % a través de su transformación y un 25 % mediante el reciclaje.
«Nuestro objetivo es tener reservas que puedan cubrir, al menos, las necesidades de la industria europea para un periodo de un año» declaró Stéphane Séjourné, el vicepresidente de la Comisión Europea para la Prosperidad y la Estrategia Industrial.
España será el protagonista
A pesar de que no hay detalles de la cantidad de proyectos ni los países en los que se llevarán a cabo, según datos proporcionados por la Comisión Europea, España es uno de los países con mayor diversidad de minerales y tierras raras.
Sin embargo, los proyectos de minas en España provocan mucha polémica, principalmente por la oposición de grupos vecinales y ambientalistas. Por ejemplo, la empresa Quantum ha intentado extraer tierras raras en el Campo de Montiel, Ciudad Real, pero no ha obtenido los permisos ambientales.
Por otro lado, tenemos a Extremadura New Energies, parte de Infinity Lithium, quien está enfrentando problemas para abrir una mina de litio en Valdeflorez, provincia de Cáceres, debido a la resistencia de los grupos ambientalistas.
Pero esto no significa que deban darse por vencidos, solamente nos recuerda que hay algunos desafíos por abordar y la importancia de encontrar un equilibrio entre la extracción de los recursos, el medio ambiente y las comunidades.
Por lo tanto es muy importante que la Unión Europea tome las medidas necesarias en cada proyecto, para minimizar los impactos ambientales y no perjudicar a las comunidades que vivan cerca de dichas zonas.
La guerra recién comienza
Con estas metas ya establecidas, Europa ha dejado claro que no quiere depender más de China, lo cual podría ser un duro golpe para el gigante asiático, ya que por un lado estaría perdiendo un cliente en el negocio de la exportación pero al mismo tiempo ¡se le suma un competidor!
Si varios países de Europa comienzan a trabajar duro para cumplir estas metas, probablemente empiecen a producir muchos más recursos y quizá en un futuro puedan ser competencia para China en esta guerra de recursos.
De hecho acá te contamos más sobre los planes de España para esta guerra. Sin duda este es solo el inicio y aún no sabemos qué proyectos vendrán a futuro, pero esperamos que la extracción de estos valiosos recursos se haga con responsabilidad y con el respeto que merece nuestro planeta.