El universo está lleno de misterios sin resolver y muchas de las cosas que imaginamos, no sabemos si son solo ideas futuristas o si realmente se pueden volver realidad, tal como lo que está sucediendo ahora, pues una inteligencia superior nos está ayudando en una meta que antes parecía imposible, pero ¿de qué se trata?
Un material muy importante para la transición
Existe una sustancia química muy importante en muchas industrias, un material utilizado como fertilizante, y de hecho, se le atribuye haber salvado a gran parte del mundo de la hambruna en el siglo XX, sin embargo tiene un lado oscuro, pues su producción es muy contaminante.
Su producción requiere enormes cantidades de energía, temperaturas superiores a 400 °C y presiones altísimas, por lo la fabricación de amoníaco es una de las actividades industriales con mayor huella de carbono y es la responsable de alrededor del 2% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Por eso, siempre ha existido la meta de poder fabricar amoníaco verde, es decir un amoníaco cuya producción siguiera siendo igual de eficiente pero sin contaminar nuestro planeta y aunque hasta hace unos años eso parecía imposible, ahora estamos cada vez más cerca.
La meta del amoníaco verde
Sucede que unos científicos e ingenieros de la UNSW Sídney (Australia) han logrado hacer más eficiente y sostenible la producción de amoníaco verde, utilizando inteligencia artificial, un logro tan impresionante como la construcción de edificios que sudan.
Todo comenzó en el 2021 cuando el equipo de la UNSW había descubierto una forma de producir amoníaco de forma limpia, usando solo aire, agua y energía renovable, con esto demostraron que efectivamente el amoníaco podía crearse sin emisiones de carbono.
Sin embargo, aún quedaba un gran desafío y era mejorar la eficiencia, básicamente producir más amoníaco con menos energía y para ello los investigadores necesitaban encontrar el catalizador más adecuado que lograra acelerar esta reacción química.
El equipo hizo una lista de 13 metales prometedores, con propiedades para absorber nitrógeno e hidrógeno, sin embargo, el mejor catalizador probablemente sería una combinación de varios de estos metales lo que arrojaba un total de más de 8000 combinaciones posibles.
Obviamente probar cada una de ellas en el laboratorio sería imposible, pero aquí es donde la inteligencia artificial cobró protagonismo, así que los investigadores hicieron un modelo basándose en las propiedades conocidas de cada metal.
Un gran logro gracias a la inteligencia artificial
Gracia a este sistema, de las más de 8000 posibilidades, la IA los guió para centrarse en solo 28 de los candidatos más prometedores y el resultado fue un catalizador multimetálico compuesto de hierro, bismuto, níquel, estaño y zinc.
En las pruebas prácticas, esta combinación no solo fue exitosa, sino que multiplicó por siete la tasa de producción de amoníaco, manteniendo una eficiencia faradaica (conversión de energía eléctrica en energía química útil) cercana al 100%.
Con este catalizador se logra una producción de amoníaco a una temperatura de apenas 25 °C, logrando que el amoníaco verde no solo sea viable ambientalmente, sino que también sea económicamente competitivo.
Uno de los mayores impactos de esta innovación es que permite descentralizar la producción de amoníaco, ya que ahora, en lugar de depender de gigantescas plantas industriales, se pueden implementar módulos compactos de amoníaco del tamaño de un contenedor.
Pero además de su uso como fertilizante, el amoníaco es un buen transportador de hidrógeno y la posibilidad de generarlo a bajas temperaturas lo vuelve una opción muy viable para el almacenamiento y transporte de energías renovables.
Con este avance ha quedado demostrado que la producción de amoníaco verde si es posible ¿Quién diría que la IA ayudaría a volver un proceso más sostenible? Pues ahora hemos visto que sí es posible y que si se utiliza de manera correcta, se pueden lograr grandes resultados que nos ayuden en las metas de sostenibilidad y transición energética. Y si quieres saber más sobre el amoniaco verde, acá te contamos que podría reemplazar a los combustibles tradicionales.