La borrasca Olivier va a marcar el tiempo en el inicio de esta Semana Santa 2025: va a llover en casi todo el país. Los días claves de la Semana Santa serán muy ‘complicados’ meteorológicamente hablando.
Será una vaguada la responsable de estas precipitaciones. Después, una nueva borrasca amenazará también los días festivos. Este año Tráfico prevé 15,8 millones de desplazamientos en Semana Santa y la lluvia marcará, al menos, la Operación Salida en carretera en buena parte de España.
Lluvias generalizadas
El historial de lluvias que lleva azotando durante más de un mes a España parece no tener aún fin. Y es que las saetas, los tambores y las procesiones podrían venir acompañadas de más de un chaparrón la mayor parte de la Semana Santa, que este año se celebra del 13 al 20 de abril.
La llegada de Olivier, la 15ª borrasca que se sitúa en la Península, ha regado de lluvias España, una situación que se mantendrá esta jornada. Se esperan probablemente precipitaciones localmente fuertes en Baleares, nordeste peninsular y litoral atlántico gallego y también tormentas acompañadas por rachas muy fuertes de viento en el nordeste peninsular.
Además, se prevén vientos del oeste con intervalos de fuerte y probables rachas muy fuertes en el Estrecho, Alborán y en la segunda mitad en el litoral de Galicia y del Cantábrico. Se espera además un descenso notable de las temperaturas máximas en el interior noroeste.
Este martes estarán en aviso amarillo La Cordillera Cantábrica en las provincias de León y Palencia y la zona de Sanabria (Zamora) ante la posibilidad de nevadas, según la información de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
En concreto, el aviso se mantendrá entre las 12.00 y las 20.59 horas de este martes, 15 de abril, ante la probabilidad de que se produzcan nevadas por encima de los 1.100 metros que pueden llegar a acumular hasta 5 centímetros en 24 horas.
Se espera tiempo inestable
La Semana Santa de 2025 va a estar marcada por el tiempo inestable por el paso de frentes asociados a borrascas atlánticas y la llegada de aire frío a las capas altas de la atmósfera, que va a dar lugar a generosas lluvias y chubascos ampliamente repartidos.
Las precipitaciones serán más frecuentes este lunes y martes para dar paso a una breve tregua y volver a intensificarse de cara al fin de semana, de acuerdo con la predicción del portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo.
En concreto, tras un inicio lluvioso de la semana, se sucederá un periodo «algo más tranquilo» en algunas zonas del país entre el miércoles y el viernes, aunque la recta final de la semana podría de nuevo lluviosa en amplias zonas del país.
De acuerdo con el portavoz de Aemet, habrá chubascos intermitentes, pero que localmente serán fuertes y con granizo, especialmente en los tercios norte y este del territorio.
La cota de nieve bajará hasta unos 900 metros en el noroeste y a 1.000 a 1.400 metros en el resto. Por esta razón, podría nevar no solo en zonas de montaña, sino también en algunas localidades. En cuanto a Canarias, las lluvias serán probables las lluvias en el norte de las islas y las temperaturas no variarán demasiado con respecto al lunes.
En el resto, habrá intervalos nubosos, pero es probable que no haya precipitaciones. Además, la cota de nieve seguirá en torno a unos 1.000 a 1.400 metros y las temperaturas diurnas no experimentarán grandes cambios. En Canarias, se registrarán algunas precipitaciones en el norte del archipiélago.
Lluvia: ‘tregua’ el Jueves Santo
El Jueves Santo será una jornada de tregua. La única excepción estará en Galicia y las comunidades cantábricas, mientras que en el resto del país habrá intervalos nubosos con algún posible chaparrón en puntos del interior. De nuevo, habrá heladas al amanecer en zonas del norte, al igual que en puntos del centro.
Sin embargo, las temperaturas diurnas ascenderán de forma notable y se irán normalizando, aunque aún seguirán bajas para la época de año en puntos del norte de la Península. De esta manera, ciudades como Alicante, Murcia, Sevilla o Valencia rondarán los 25ºC, mientras que Burgos, Segovia o Pamplona se moverán en torno a los 14º C de máxima. Mientras, en Canarias no se esperan lluvias y las temperaturas subirán ligeramente.
Acabaremos la Semana Santa con más lluvia
Aunque la incertidumbre es alta de cara al Viernes Santo, el acercamiento de una nueva borrasca daría lugar a lluvias en el norte, oeste y centro del territorio peninsular. Según el portavoz de Aemet, estas precipitaciones podrían ser abundantes en Galicia, norte de Extremadura y sur de Castilla y León.
En cualquier caso, ha precisado que es probable que las comunidades mediterráneas queden al margen de las precipitaciones. En esta jornada, los valores térmicos continuarían subiendo y solo habría heladas en alta montaña. Por la tarde, es probable que, de hecho, se superen los 25 ºC en las comunidades mediterráneas.
En principio, las lluvias del sábado serían más generalizadas. Del Campo ha especificado que se podrían producir chubascos en amplias zonas del territorio peninsular, mientras que el domingo las mayores probabilidades de precipitación se darían en el norte, en el este y en Baleares. El portavoz de Aemet ha especificado que todavía no hay una tendencia clara en cuanto a las precipitaciones para estos dos días.
Descenso de las temperaturas
En cuanto a las temperaturas, bajarán en este inicio de semana y serán más frías de lo normal para la época del año hasta el jueves. Por ello, habrá heladas en algunos puntos de la meseta norte y nevadas en cotas bajas.
Por días, este lunes se formarán tormentas que de forma dispersa que podrán afectar a amplias zonas del territorio, según Del Campo. Se prevé que las más intensas caigan en Navarra, Aragón, Cataluña y Baleares, donde vendrán acompañadas de rachas muy intensas de viento. A su vez, también lloverá con fuerza en el litoral de Galicia, en este caso, debido a la llegada de un frente.
En este contexto, la cota de nieve bajará de los 1.800 metros a 1.200 metros a final del día y mientras, en Canarias, se registrarán lluvias débiles en el norte de las islas de mayor relieve, después de un fin de semana muy lluvioso en el archipiélago, que ha sufrido el impacto de la borrasca ‘Olivier’.
En lo que respecta a las temperaturas, estas van a bajar en el oeste de la Península, así como en ciudades como Córdoba o Sevilla, donde se quedarán en torno a 20 ó 22 ºC, similar a los valores que registrarán ciudades del norte como San Sebastián o Bilbao. En el Cantábrico, sin embargo, subirán las temperaturas de forma notable.
El descenso térmico se extenderá el martes a la mayor parte del país, especialmente en los valores diurnos. Algunas ciudades de Castilla y León ya amanecerán rozando la helada, como es el caso de Ávila o Burgos. Este día, un frente frío atravesará la Península de oeste a este, dejando lluvias a su paso. Tras ello, llegará aire frío, sobre todo en las capas altas de la atmósfera, lo que dejará un tiempo inestable, que favorecerá la formación de numerosas tormentas.
Del Campo ha avanzado que el amanecer del miércoles irá acompañado de heladas en zonas del norte y centro de la Península. Por ejemplo, Ávila, Soria, Burgos, Palencia o Valladolid amanecerán con cero grados o valores bajo cero. Mientras, de día habrá chubascos en Galicia, el Cantábrico, Cataluña y Baleares. En menor medida, se podrán producir también en Castilla y León y en zonas de montaña de la Península.
A partir del Jueves Santo, el escenario más probable, aunque con mucha incertidumbre, indica una disminución generalizada de la inestabilidad y recuperación de las temperaturas. No obstante, todavía hay probabilidad de precipitaciones en el tercio noroeste peninsular. Más incierta será la situación durante los días «gordos» de Semana Santa, aunque los pronósticos se irán actualizando según se vayan acercando.
¿La maldición de la Semana Santa?
Los paraguas, los retrasos y las vírgenes cubiertas se han convertido en una imagen común cuando llega esta festividad. En esta época es normal que llueva, tal y como explica Laplana: «La primavera es muy inestable. Sin embargo, también es cierto que, como la Semana Santa no tiene fechas fijas, nunca es exactamente la misma fecha, por lo que tampoco se pueden hacer estadísticas exactas».
La meteoróloga detalla que este periodo del año es bastante inestable y cambiante, especialmente en cuanto a las temperaturas, «que pueden subir y bajar. Estamos dentro de la norma».
Sobre la pasarela de borrascas, Laplana destaca que este año estamos en una situación similar a la del año pasado. «No es que se hayan dado más borrascas, sino que han sido muy seguidas», concluye, lo cual podría estar influido, aunque a falta de investigaciones de atribución futuras, al cambio climático.