Una cosa está clara: pese a los innegables progresos logrados hasta ahora, los vehículos eléctricos no pueden sustituir a corto plazo a los automóviles con motor de combustión. Los modernos grupos diésel y de gasolina seguirán siendo la fuerza impulsora del automóvil: en el tráfico individual con turismos, especialmente en largos recorridos, y sobre todo en el transporte de mercancía sobre camiones. En consecuencia, los ingenieros de Daimler y Mercedes-Benz han desarrollado un concepto con diferentes opciones alternativas, en el que sigue ocupando un papel importante el motor de combustión, que no es, ni mucho menos, un modelo a desechar.
En el tráfico de largas distancias seguirán dominando los modernos motores de combustión, con o sin módulo híbrido, a los que se sumarán los vehículos eléctricos propulsados por pila de combustible. En el tráfico de cercanías, estas dos opciones se completarán con vehículos híbridos enchufables y con automóviles propulsados por pila de combustible. Y en el tráfico urbano —sobre todo en el creciente número de metrópolis en todos los continentes—se utilizarán prioritariamente conceptos exentos de emisiones locales con propulsión eléctrica por batería o por pila de combustible.
Compromiso para mejorar los combustibles alternativos y la infraestructura
La implicación de Daimler en numerosos campos no se limita al desarrollo de las tecnologías de propulsión, sino que incluye la experimentación con combustibles alternativos y el desarrollo de una infraestructura idónea, especialmente de estaciones de recarga para baterías y de gasolineras con surtidores de hidrógeno. Algunos ejemplos muy significativos son el proyecto «e-mobility Berlin» o el proyecto de pilas de combustible en Hamburgo. Daimler pone a disposición más de 100 vehículos eléctricos de las marcas Mercedes-Benz y smart para el proyecto de Berlín; la empresa RWE, el socio de Daimler en este proyecto, se encarga de habilitar 500 estaciones de recarga de baterías en el entorno urbano.
Mercedes-Benz contribuye al proyecto en Hamburgo con diez autobuses propulsados por pila de combustible y 20 Clase B F-CELL, mientras Vattenfall asegura el hidrógeno necesario, generado utilizando energías renovables, y los socios Shell y Total habilitarán cuatro gasolineras de hidrógeno en Hamburgo.
Mañana y pasado mañana: automóviles con propulsión eléctrica
En paralelo con el optimizado de vehículos con motor de combustión, los ingenieros de Daimler y Mercedes-Benz trabajan sistemáticamente con vistas al objetivo a largo término de la empresa: la conducción exenta de emisiones locales utilizando vehículos propulsados por baterías eléctricas o pilas de combustible. Un elevado número de vehículos experimentales de las marcas Mercedes-Benz y smart se han acreditado ya en pruebas a gran escala, habiendo recorrido varios millones de kilómetros bajo condiciones reales de uso. Las nuevas generaciones, equipadas con tecnología próxima a la producción en serie, se prueban actualmente dentro del marco de proyectos piloto.
El automóvil eléctrico: una de varias opciones viables
Hoy en día se habla del automóvil eléctrico como un «candidato preferente» para la reducción de las emisiones de CO2 debidas al tráfico rodado. Esto ha contribuido a difundir en la opinión pública la idea de que la era de los automóviles eléctricos puede comenzar en breve. La realidad es muy distinta: los automóviles eléctricos —tanto si se utiliza la pila de combustible como si se emplea una batería de propulsión o una combinación de batería y motor de combustión como Range Extender—, encierran enormes posibilidades con vistas a un tráfico más ecológico, pero están aún muy lejos de poderse producir en grandes series. No sólo falta capacidad de producción para baterías potentes y seguras; tampoco se dispone de una infraestructura de puntos de recarga ni de surtidores de hidrógeno para los vehículos con pila de combustible. Los automóviles eléctricos —silenciosos, eficientes y exentos de emisiones a nivel local— constituyen una opción muy interesante para los núcleos urbanos, en donde cada vez son más frecuentes las limitaciones a la conducción y las zonas de circulación restringida.
Un requisito decisivo para todos los sistemas de propulsión eléctrica es disponer de un acumulador de energía potente, fiable y seguro. El «rendimiento» del sistema eléctrico completo depende de la batería, y en primer lugar de su capacidad de almacenamiento. Por este motivo, Daimler otorga prioridad al desarrollo de baterías potentes para tracción. Junto a los atributos mencionados más arriba, estas baterías tienen que alcanzar una gran durabilidad y seguridad en caso de impacto, y deben ser reciclables. La única tecnología conocida que cumple todas estas condiciones es la utilizada en la nueva batería de iones de litio, acreditada ya en los vehículos híbridos. Sus ventajas más importantes son las dimensiones compactas y un rendimiento claramente mayor que las baterías convencionales de níquel-hidruro metálico. Por lo demás, esta batería se distingue por un innovador sistema de refrigeración y gestión de la temperatura, que garantiza una alta fiabilidad, con independencia de las condiciones climáticas, y una excelente capacidad de arranque en frío.
Fomento de la infraestructura necesaria para automóviles eléctricos
Antes de que el automóvil eléctrico pueda constituir una opción auténtica para asegurar una movilidad sostenible a largo plazo, tiene que superar diversas limitaciones tecnológicas. En especial hay que mencionar la autonomía, todavía relativamente corta, y los ciclos de recarga largos de las baterías. Ambos aspectos están en contradicción con lo que los conductores entienden desde hace varios decenios por una «movilidad sobre ruedas», y sobre todo con lo que esperan hoy y en el futuro: la posibilidad de desplazarse con libertad a cualquier destino, que presupone también la posibilidad de repostar cómodamente en todos los lugares del mundo. Daimler y Mercedes-Benz promocionan por tanto el desarrollo de la infraestructura necesaria: por ejemplo, dentro del marco de proyectos a gran escala como «e-mobility Berlin». Otros desafíos que hay que afrontar son los costes, la idoneidad de la tecnología para el uso a diario y, no menos importante, la generación de energía primaria renovable.
Mercedes-Benz ha desarrollado a tiempo conceptos idóneos para lograr esta meta. El Concept BlueZERO, próximo a la producción en serie, ofrece una visión muy concreta de una movilidad ecológica basada en los motores eléctricos. Este inteligente concepto modular permite realizar tres vehículos con una arquitectura común y configuraciones distintas del ramal de propulsión. Todos ellos satisfacen las exigencias de los clientes a una movilidad sostenible: el BlueZERO E-CELL utiliza una propulsión eléctrica por batería y alcanza una autonomía en régimen puramente eléctrico de hasta 200 kilómetros; el BlueZERO F-CELL está equipado con pilas de combustible y alcanza una autonomía eléctrica claramente superior a los 400 kilómetros; y el BlueZERO E-CELL PLUS combina la propulsión eléctrica por batería con un motor de combustión adicional como generador de electricidad («Range Extender»). Esta última versión permite alcanzar una autonomía total de 600 kilómetros y circular con la electricidad de la batería hasta 100 kilómetros, siendo plenamente idónea para el uso diario en cuanto a la seguridad y la disposición de los componentes.
El componente esencial para la movilidad eléctrica es la batería. Las baterías modernas y potentes de iones de litio constituyen el núcleo de la electrificación del automóvil en todos sus campos de aplicación. Por este motivo, Daimler trabaja intensamente para lograr la industrialización y estandarización de esta tecnología de baterías. Se trata de crear las condiciones necesarias para alcanzar márgenes de beneficios interesantes en su producción y, por consiguiente, para poder comercializar las baterías a precios competitivos. El objetivo del desarrollo es una producción industrial y estandarizada de baterías de iones de litio para la automoción, que se utilizarán tanto en los modelos híbridos como en los vehículos eléctricos propulsados por pila de combustible o por batería de tracción.
En el desarrollo de la tecnología de iones de litio, Daimler se beneficia de sus conocimientos, fruto de muchos años de investigación. La empresa ha registrado durante los últimos 30 años más de 600 patentes relacionadas con vehículos propulsados por batería; de ellas, más de 230 patentes se refieren directamente a la tecnología de iones de litio. Con el fin de asegurar a largo plazo su papel de pionero en este campo, Daimler adquirió en 2008 una participación del 49,9% de la empresa Li-Tec, filial de Evonik. Además, se fundó en régimen de joint venture una empresa común, la «Deutsche Accumotive GmbH & Co. KG» (participación: 90% Daimler, 10% Evonik).
A partir de 2012, Daimler dispondrá por tanto de una amplia capacidad de producción en exclusiva de baterías modernas de iones de litio, que se utilizarán en todos los campos de la automoción: desde los modelos híbridos hasta los vehículos eléctricos y desde los turismos hasta los vehículos industriales. Con ello, Daimler tiene un acceso directo a la tecnología más importante para una conducción exenta de emisiones. Daimler sigue fomentando en paralelo el desarrollo de la propulsión eléctrica: también en cooperación con diversos socios, siempre que resulta razonable.
Movilidad sostenible gracias a una mezcla de sistemas de propulsión
«En el futuro, la movilidad no se limitará a una única opción técnica, sino que se apoyará sobre varios pilares», comenta Dr. Thomas Weber. «La clave de una movilidad viable a largo plazo, es decir, conforme con la demanda de los usuarios y compatible con las necesidades ecológicas, es una mezcla diversificada de sistemas de propulsión, formada por motores de combustión, conceptos híbridos y sistemas de propulsión eléctrica por batería o pilas de combustible. Estas tecnologías de propulsión —que estamos introduciendo en el mercado de forma sistemática, en beneficio tanto de nuestros clientes como de nuestro planeta—, forman parte integrante de nuestra estrategia a favor de una movilidad sostenible.»