La capital catalana ya es un referente europeo en el uso de vehículos híbridos para el transporte público urbano, y es que su flota híbrida es la tercera de Europa
Barcelona ha servido en el último año de campo de pruebas de cinco buses urbanos híbridos, en el marco del programa Elena de la UE de asistencia local en el sector de la energía para desarrollar soluciones sostenibles.
La capital catalana ya es un referente europeo en el uso de vehículos híbridos para el transporte público urbano, y es que su flota híbrida es la tercera de Europa, sólo superada por Londres y Manchester, ha informado a Europa Press Transports Metropolitans de Barcelona (TMB).
En el último año han circulado por la ciudad un Man Lion’s City Hybrid, un Tata híbrido, un Iveco Citelis Hybrid y un Volvo 7900, que tras las pruebas han vuelto a su fabricante, y un Tata-Dennis híbrido, este último de la flota de TMB.
Se ha establecido un mismo programa de pruebas para todos con dos días de circulación sin pasajeros para medir consumo y emisiones en dos líneas comerciales: una llana –la 44, Estació de Sants-Olímpic Badalona– y otra con desnivel –la 55, Parc de Montjuïc-Plaça Catalana–.
El programa ha incluido una tanda de ensayos en circuito cerrado en las instalaciones de Idiada en Santa Oliva (Tarragona), y contando tiempo de preparación y caracterización, cada coche ha pasado 15 días haciendo pruebas.
Según TMB, esta tecnología es la más limpia, contrastada y asequible de las disponibles para operar buses urbanos, ya que con la propulsión eléctrica –el motor térmico sólo hace de generador– se logran reducciones de consumo y emisiones del 20%-30%.
El primer autobús híbrido a circular con pasajeros por Barcelona fue un midi de Castrosua que estuvo en pruebas en 2009, y entre híbridos nuevos y diesel reconvertidos –Retrofit– ya cuenta con una flota de 90, y llegará a 100 esta primavera; más adelante, la ampliará con 20 más.
Este viernes la flota de TMB se ha engrosado con un bus híbrido eléctrico producto de la transformación del modelo que funciona con gas natural comprimido, que ha empezado a circular con pasajeros en la línea 37 –Hospital Clínic-Zona Franca–.
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