La innovación en coches de hidrógeno, han ido aumentando con el paso de los años, por ejemplo la primera moto con este combustible. Pero, mayores avances, también implican mayor competencia y ahora es Japón quien estaría en peligro de perder sus avances a causa de China, pero ¿Qué ha sucedido?
China nuevamente toma la delantera
China está avanzando en la industria automotriz a pasos agigantados. Inicialmente, los coches chinos se limitaban a su mercado nacional, sin embargo, con el paso de los años han ido ganando territorio a nivel global.
Al igual que muchos países europeos y asiáticos, el gobierno chino está comprometido con la sostenibilidad, por lo cual, están trabajando en diferentes metas que disminuyan las emisiones de gases efecto invernadero.
Para lograr estas metas, están convencidos que una de las herramientas más eficientes en el área del transporte, sería el hidrógeno. De hecho, en el 14º Plan Quinquenal de China, que abarca los planes del país hasta 2025, el hidrógeno se consideró uno de los seis sectores más importantes para el futuro.
El hidrógeno: una opción con grandes desafíos
El hidrógeno es el elemento más abundante del universo y según Agencia Internacional de la Energía es considerado un «portador de energía versátil«.
Sin embargo, en la actualidad sus métodos de extracción más comunes generan muchos gases de efecto invernadero, lo que es contraproducente para las metas de sostenibilidad.
Actualmente, los coches de hidrógeno funcionan de dos maneras: con baterías o con motores de combustión interna. Si bien, al utilizar hidrógeno, estos motores no producen CO2, sí emiten óxido de nitrógeno.
Esta ha sido una de las razones, por las que marcas japonesas como Toyota, sean cuestionadas. Sin embargo, si encontraran materiales más eficientes y sostenibles para las baterías estas emisiones podrían disminuir drásticamente.
China busca opciones más eficientes
Teniendo esto en cuenta, China ha estado buscando diferentes alternativas hasta llegar a una increíble innovación, que sin duda preocupará a la competencia. Se trata de la creación de una pila a combustible basada en hidrógeno.
Esto ha sido posible gracia a un estudio realizado por Jiao Kui, un profesor de la Universidad de Tianjin que forma parte de equipos de desarrollo de energías verdes.
Esta pila de hidrógeno es realmente muy eficiente y tiene un funcionamiento óptimo a la hora de transferir el calor entre el gas y el agua. Esto, le permite generar electricidad en una célula de un tamaño muy pequeño y con una densidad muy grande.
Japón estaría perdiendo la carrera por el hidrógeno
Por otro lado, estas iniciativas sin duda despiertan el interés en la competencia, principalmente de Japón y países europeos que constantemente pelean por el liderazgo de esta industria.
A su vez, la llegada de nuevas innovaciones puede alterar de manera significativa la demanda y perjudicar directamente a Japón, quien se enfrenta a una creciente presión para mantener su posición en el mercado.
Sin embargo, Japón también está intentando innovar con otras tecnologías sostenibles, por ejemplo los primeros motores de manganeso, lo que nos hace pensar que quizá no está precisamente perdiendo la guerra, sino solo tomando otros caminos.
Aún no sabemos quien es el ganador
Por otro lado la batalla por el dominio del mercado de vehículos de hidrógeno no incluye solo a China y Japón. Otros países europeos también están invirtiendo en investigación y desarrollo de tecnologías de hidrógeno, por lo que aún no podemos afirmar quien será el líder de esta tecnología.
Esta situación tiene algunas ventajas desde el punto de vista ambiental, pues la creación de nuevos motores de hidrógeno incentiva a un mercado más comprometido con el medio ambiente.
En conclusión, China ha tomado la delantera con la creación de la nueva pila de hidrógeno, sin embargo, la carrera por liderar el mercado del hidrógeno, continuará. Este tipo de avances, al igual que los primeros barcos de hidrógeno, sin duda incentivan la competencia y favorecen el camino a una movilidad más sostenible.




















