Durante un largo tiempo la industria del transporte ha emitido grandes porcentajes de gases contaminantes que ponen en riesgo el medio ambiente y el bienestar de la atmósfera, creando grandes conflictos que potencian el cambio climático y sus devastadoras repercusiones que se hacen presentes a lo largo y ancho del mundo. Por esto mismo, un gran número de empresas busca una nueva alternativa para hacer más sostenible este sector.
Una nueva y prometedora alternativa a los combustibles fósiles
Durante un largo tiempo hemos visto todo tipo de innovaciones que benefician al sector del transporte, convirtiéndolo en uno más sostenible y cero emisiones contaminantes. Así es como surgieron las movilidades eléctricas, híbridas y las impulsadas por hidrógeno, sin embargo, estas opciones aún tienen conflictos a la hora de ponerlos en marcha.
Por esto mismo, diferentes empresas y científicos buscan la manera de innovar con nuevos y novedosos combustibles cero emisiones que sean fáciles de fabricar y tengan ventajas similares a las que ofrece el hidrógeno y la electricidad, es decir, una mayor autonomía y menos índices de contaminación ambiental.
Así es como surgió la opción de utilizar bioetanol y octanol como combustible para movilidades sostenibles y cero emisiones. Estamos hablando de ecocombustibles que absorben dióxido de carbono en su proceso de fabricación y lo emiten al momento de quemar el combustible en el motor. Si bien ni es una movilidad totalmente libre de emisiones, sí puede ser una excelente opción para dejar en el olvido el tradicional combustible fósil.
Bioetanol y octanol llegan con una nueva propuesta cero emisiones
Desde hace algún tiempo atrás, un grupo de científicos de la Universidad Técnica de Aquisgrán (RWTH Aachen University) ubicada en Alemania, pusieron manos a la obra y se enfocaron en una nueva innovación de enfocada en un modelo de combustión que funcione con estos novedosos combustibles: bioetanol y octanol.
Lo más curioso es que, los científicos en cuestión, buscan que estos combustibles se conviertan en opciones totalmente cero emisiones. La respuesta fue un nuevo y mejorado motor impulsado por octanol y bioetanol. Pues bien, podemos recordar que, anteriormente mencionamos que estas alternativas sí emiten un cierto porcentaje de dióxido de carbono al momento de ser utilizados y quemados a combustión.
Ahora, mediante el empleo de bioetanol y octanol, se podría conseguir un total de cero emisiones, mientras que se intenta sacar del mercado del transporte los tradicionales combustibles de origen fósil altamente contaminantes y conocidos por ser los gases de efecto invernadero.
¿Cómo funciona el sistema de este nuevo combustible cero emisiones?
Para comprender bien el motivo por el cual no produce emisiones de carbono este sistema, primero tenemos que saber cómo funciona el mismo. En primer lugar, la combustión dual de bioetanol y octanol forma un remolino controlado mientras se encuentra en la cámara de combustión, la misma que posteriormente se convertirá en una combustión eficiente y totalmente libre de emisiones contaminantes.
La creación de los científicos combina una inyección directa y una alta relación de comprensión. De esta forma se utiliza un combustible de un elevado octanaje y una reactividad alta y baja. Para entenderlo mejor, es una función extremadamente similar a la que se emplea normalmente en los motores diesel de combustión interna pero con la gran diferencia de que sus emisiones no resultan ser nocivas y dañinas con el medioambiente.
En conclusión, la industria del transporte está avanzando hacia una revolución sostenible gracias a innovaciones como el uso de bioetanol y octanol. Estas alternativas a los combustibles fósiles ofrecen una opción más ecológica que, aunque aún no es completamente libre de emisiones, promete reducir significativamente el impacto ambiental del transporte.