En pleno proceso de descarbonización, surge un motor imposible que se alimenta de nitrógeno líquido, un combustible 700 veces más poderoso que todo lo conocido. Conforme la industria automotriz sigue buscando un coche eléctrico fiable capaz de competir con los vehículos de combustión, las piezas de nitrógeno líquido emergen como una alternativa viable.
Los vehículos de nitrógeno líquido albergan ventajas más significativas que las que podemos encontrar en coches de combustión y eléctricos. Por ejemplo, al contrario de lo que sucede con coches eléctricos que tardan en cargarse y se encuentran limitados por los tiempos de carga, las piezas de nitrógeno líquido pueden repostar en el tiempo más acotado posible. Se trata de una experiencia más parecida a los coches de combustión en este sentido.
El nitrógeno líquido se expande a causa de su conversión al estado gaseoso para generar una potencia significativa, que es óptima para la propulsión de vehículos. Sumado a esto, no contempla fuego, óxido y tóxicos, lo que permite que su empleo sea más seguro que el de gasolina y las nuevas tecnologías de baterías usadas en los vehículos electrificados.
El primer motor de nitrógeno líquido ya existe
Diferentes estudios exponen que el nitrógeno es 700 veces más potente que el hidrógeno y trabaja a -200ºC (un proceso del que te contamos más en este artículo). Una gota única de nitrógeno líquido es capaz de multiplicar por 700 su volumen cuando se evapora. La expansión de estos gases puede usarse para mover un pistón y generar movimiento.
Este fue el sistema de funcionamiento registrado en Cryocar, una furgoneta convertida de la Universidad de Washington. Su invento fue usado a principios de la década pasada. Asimismo, existió otro proyecto similar llamado CoolN2Car, que llevaba la firma de la Universidad del Norte de Texas.
Reino Unido se une a la fiebre del nitrógeno líquido
Siguiendo esta línea, una empresa de ingeniería británica que ha elaborado motores para tanques de la Primera Guerra Mundial y modernos supercoches de McLaren, trabaja en el desarrollo de un motor mejorado con nitrógeno líquido.
Viene de la mano de la promesa de acotar los costos de combustibles de los camioneros y ampliar el futuro del motor diésel, disminuyendo las emisiones contaminantes. No obstante, esta pretensión aún se encuentra lejos de ser algo real.
En 2019, la empresa mencionó 5 años de espera para ver el ensamblaje del motor, el atornillado, la certificación para uso comercial y la llegada al mercado de los motores CryoPower. Sin embargo, ya pasaron 6 años y la investigación sobre la operatividad de este tipo de motores sigue su curso.
Retos y proyección del motor de nitrógeno líquido
Antes de que el motor de nitrógeno líquido pueda convertirse en una realidad, la tecnología de nitrógeno líquido debe superar algunas limitaciones.
Los prototipos actuales, como el NL2000 elaborado por investigadores de la Universidad de Washington, solo albergan una potencia de descarga de alcance limitado comparada con los coches tradicionales.
Los motores neumáticos usados en estos prototipos necesitan de una importante mejora en cuanto a eficiencia para que los coches de nitrógeno líquido funcionen de manera eficiente. Serán decisivos los próximos años, tiempo en el que se analizará si los avances tecnologicos pueden mitigar las deficiencias existentes.
La instauración de motores de nitrógeno líquido podría traer consigo otra perspectiva revolucionaria de la tecnología de transporte ecológico. A su vez, podría competir con muchas de las tecnologías actuales de combustibles alternativos.
En el futuro, el motor imposible podría alimentarse de nitrógeno líquido, un combustible 700 veces más poderoso que todo lo conocido. Una solución que sorprende tanto como este combustible súper potente. Aseguran que podría jubilar a los vehículos electrificados.