“Hace 16 millones de años, el reptil Diplocynodon ratelii habitaba en lagos y extensas zonas pantanosas, poblando las costas de los ecosistemas boscosos que existían, en lo que hoy conocemos como Cataluña.”
Los fósiles encontrados en el sitio de Els Casots en la Cuenca del Vallès-Penedès confirman no sólo que estos son los restos más recientes del género en la Península Ibérica, sino también que el Medio Ambiente era diferente y las temperaturas eran más altas que las actuales.
Una nueva investigación
Un grupo de investigadores que trabajaban haciendo excavaciones en el sitio de Els Casots en la década de 1990 hallaron los restos de una especie de cocodrilo (Diplocynodon ratelii), que hasta entonces se conocía sólo para haber vivido en el sur de Francia.
Una nueva investigación publicada en la revista Comptes Rendus Palevol confirma que los fósiles son la primera evidencia de que los Diplocynodon ratelii efectivamente vivieron en esta parte de la Península Ibérica.
Según explicó David Alba del Instituto Catalán de Paleontología, en el territorio ibérico hasta ahora sólo se habían registrado fósiles mucho menos recientes, de las épocas Eocena y Oligocena, hace más de 23 millones de años.
Para llegar a estas conclusiones, el estudio proporcionó las descripciones anatómicas más detalladas de esta especie que se tienen hasta la fecha, destacando el pequeño tamaño del reptil, que midió no más de un metro de largo, según los cráneos encontrados.
«El género Diplocynodon se distribuyó ampliamente por toda Europa durante más de 40 millones de años (desde el Paleoceno hasta el Mioceno) e incluye muchas especies de pequeños cocodrilos similares en apariencia a los caimanes y los aligátores (que pertenecen a la especie extinta de la super-familia alligatoroidea” dijo el investigador.
Fauna catalana del mioceno temprano
Hoy en día, los aligatoroidea son más comunes en las Américas y Asia oriental, pero hace millones de años estaban muy extendidos por Eurasia. El Diplocynodon ratelii, que es muy similar en apariencia a los caimanes de hoy, acechaba roedores, peces y otras especies de reptiles durante el Mioceno temprano. También cazó mamíferos más grandes, tales como los ciervos ratón.
De acuerdo con los restos encontrados en los últimos años en Els Casots, estos cocodrilos también habrían compartido su hábitat con grandes mamíferos: rinocerontes, pecaríes, cerdos primitivos y bovinos, parientes extintos de elefantes (incluyendo el mastodonte y un proto-elefante llamado Deinotherium) y algunas especies carnívoras, como felinos, hiénidos y mustélidos extintos.
La presencia de cocodrilos en esta zona de la Península Ibérica puede explicarse por la evidencia del análisis de otros restos paleoambientales del sitio, que indican la existencia de un lago hace 16 millones de años.
Trabajando en colaboración con el gobierno municipal de Subirats, que posee la tierra, los científicos pretenden reabrir las excavaciones en Els Casots, catalogado como Bien Cultural de Interés Nacional y recuperar restos fósiles adicionales, que pueden contribuir a mejorar la información disponible sobre la fauna, el paleoambiente y la paleobiología de especies específicas de la zona.