La liberación ha tenido lugar en el alto de la sierra de El Perdón, un lugar que reúne las condiciones óptimas para la suelta de estos animales, tanto si van a permanecer en la zona como si, finalmente, se desplazan a otro lugar. Junto con los integrantes del grupo pamplonés, han asistido a la cita voluntarios del centro, que ayudan al personal en tareas de cría, radioseguimiento de ejemplares marcados, recogida de animales y crianza campestre.
Las aves rapaces rehabilitadas liberadas hoy son un águila calzada (Hieraaetus pennatus) de Castejón, que ingresó con una pata rota tras sufrir un trauma desconocido, un búho real (Bubo bubo) encontrado en Beriáin y un águila culebrera (Circaetus gallicus) de Andosilla, ambos ingresados como consecuencia de las heridas provocadas por disparos.
El grupo, con los animales.
El caso más llamativo es el del búho real, que se encontraba en estado muy grave tras recibir 35 perdigones, la mayoría de ellos cerca del corazón. Dos de los disparos le provocaron la rotura de un hueso del ala y un tercero, que se había quedado alojado tras el ojo izquierdo, le hizo perder parte de visión. Con el objetivo de recuperarlo, se le sometió a una operación del ala afectada y a diferentes pruebas de visión (electroretinograma, tonometría y ecografía ocular) en las que se midieron la respuesta de la retina a estímulos eléctricos, la integridad del globo ocular y su tensión para comprobar la capacidad visual del ojo dañado. Tras cinco meses en el centro el ave ha recuperado sus capacidades para volar y cazar y se encuentra en condiciones óptimas para regresar a la naturaleza.
También se encuentra en perfecto estado de salud el águila culebrera. Cuando ingresó en el centro, tenía rotos dos huesos del ala y otro de una pata como consecuencia de varios perdigones. Para reducir sus fracturas, se le sometió a técnicas quirúrgicas de traumatología y ortopedia y, tras dos meses, de rehabilitación y musculación está recuperada.
El centro atiende las 24 horas del día durante todos los días del año. En caso de encontrar un animal salvaje que, por cualquier circunstancia, no pueda valerse por si mismo, basta con llamar al 112. Tras el aviso, técnicos cualificados se ponen en contacto con el particular para localizar al animal y recogerlo con la mayor brevedad posible.
632 ingresos en 2008
Un total de 632 animales ingresaron en el Centro de Recuperación de Fauna Salvaje de Ilundáin el pasado año 2008. Más de las mitad (55%) pudieron ser liberados tras recuperarse de sus lesiones; el 35% fallecieron o fueron sacrificados debido a la gravedad de sus heridas; y el 5% restante fueron cedidos a programas de sensibilización o para ser cuidados por particulares, al tratarse, fundamentalmente, de mascotas abandonadas.
Más de la mitad de estos ingresos suelen realizarse en los meses estivales, entre junio y agosto, ya que coincide con la época de cría y las primeras semanas de emancipación de los animales jóvenes. Por el contrario, durante el invierno se registra el menor número de entradas.
Las especies más abundantes son el cernícalo vulgar, la cigüeña común, el buitre leonado, el autillo europeo, el busardo ratonero, el vencejo común y la lechuza común. En cuanto a los diferentes tipos de animales que ingresan, la práctica totalidad son aves, la mitad de ellas, rapaces. Muy por detrás le siguen los mamíferos (7,4%) y los reptiles (4,5%).
Si analizamos a las causas por las que llegan al Centro de Recuperación de Ilundáin, se observa que muchos de ellos tienen en común que se encuentran en una época temprana de su desarrollo. Otros ingresan con traumas indeterminados, afectados de fracturas en alas, patas o en estado de shock. Un 8% lo hace como consecuencia de las heridas ocasionadas por un disparo o un atropello. Además, los animales procedentes de cautividad suponen un 3% y los que llegan débiles un 10%. Del resto (11%), se desconoce la causa o es muy minoritaria.
Radioseguimiento de especies liberadas
Con el fin de conocer la capacidad de supervivencia de los animales liberados y, de este modo, evaluar la eficacia de las técnicas y protocolos de rehabilitación utilizados, se marca con transmisores a un determinado número de animales para su posterior radioseguimiento, una labor que se desarrolla con la colaboración de los voluntarios del centro de Ilundáin. Se han obtenido resultados positivos en el 50% de los casos. Uno de ellos, un autillo liberado en el parque de la Media Luna de Pamplona en 2008, fue localizado en Cádiz dos meses después. Es la primera vez que se localiza una rapaz nocturna en migración, con técnicas de radioseguimiento, en el estrecho de Gibraltar.
El Centro de Recuperación de Fauna Salvaje de Ilundáin cuenta con una red de voluntariado que participa, además, en la vigilancia y mantenimiento de nidos artificiales colocados en el campo, en el cuidado de crías y polluelos huérfanos y en la recogida de animales heridos. Además, se desarrollan actividades de sensibilización a través de charlas y sueltas en público, así como la exhibición de la exposición “Sentir como animales” por varios municipios de la Comunidad foral.