COP16, entre los principales objetivos figuran la conservación del 30% de la superficie terrestre y del 30% de los océanos del planeta para 2030, el aumento significativo de la financiación para la protección y restauración de la naturaleza que ahora se ve amenazada, la reducción del impacto de las especies invasoras, la disminución de la contaminación por pesticidas y plásticos, la gestión sostenible de la agricultura y la priorización de la participación de los pueblos indígenas y las comunidades locales.
La COP16 de la Biodiversidad, Convenio sobre la Diversidad Biológica (CBD) llega a la segunda semana de las conversaciones con la mirada puesta en los países ricos del Norte Global. A medida que la COP16 retoma las negociaciones durante una segunda semana, los países ricos van a tener que responder por una semana de inacción respecto a la entrega de fondos financieros para hacer efectiva la implementación de los objetivos. Con la llegada de los ministro/as y la agenda de la última semana de negociaciones de biodiversidad tomando forma, organizaciones ecologistas exige una entrega urgente de los compromisos para cerrar la brecha de financiamiento para la naturaleza y garantizar el acceso directo a los fondos para los Pueblos Indígenas y las comunidades locales.
La COP16 podría lograr avances significativos en la protección de la naturaleza, pero estos se ven retenidos mientras los gobiernos discuten sobre la creación de un nuevo fondo para el dinero restante que aún no ha llegado. Los líderes pueden demostrar su compromiso con una acción real rompiendo los silos entre la acción climática y de biodiversidad, acceso directo a la financiación para los Pueblos Indígenas y las comunidades locales que realizan el verdadero trabajo de protección de la biodiversidad, la protección de los océanos y los bosques, y un mecanismo de pago para que las empresas que se benefician de la información digital derivada de la naturaleza finalmente paguen lo que deben al mundo por la explotación de estos recursos naturales.
Los mismos países que destruyen la biodiversidad, ahora deben pagar por ello y financiar los objetivos para la biodiversidad
Representantes bien pagados de la industria están haciendo lo posible por socavar el progreso para asegurar que puedan seguir lucrando de la naturaleza sin costo alguno. Necesitamos menos grandes espectáculos promocionales para falsas soluciones como los ‘créditos de biodiversidad’ y más dinero para la protección real de la naturaleza, que hasta ahora ha sido inexistente. Lo que queda claro en Cali es que el mundo está listo para una acción global sobre la biodiversidad si los gobiernos logran un resultado real en la COP16.
Cada día que pasa sin cumplir los compromisos acordados es una oportunidad perdida para proteger la biodiversidad. Los países con mayores recursos tienen tanto la capacidad como la responsabilidad de impulsar el cambio, cumpliendo con los objetivos acordados y apoyando a quienes enfrentan los mayores impactos de la pérdida de biodiversidad. América Latina es una de las regiones más biodiversas del planeta, por lo que cuando los países desarrollados cumplen con sus responsabilidades financieras, no solo apoyan a estas regiones, sino que también protegen el bienestar de su propia ciudadanía. La naturaleza necesita acciones y decisiones concretas hoy para garantizar un futuro equilibrado para todos.