Día Mundial de la Vaquita Marina 2023. La especie figura en la Lista Roja de la UICN como al borde de la extinción. Es tan grave su estado que los científicos lo consideran el mamífero marino más amenazado del planeta. Se conoce su existencia desde hace apenas 65 años y según el último recuento solo sobrevivían a mediados de 2013 de 10 a 13 ejemplares.
Se cree que sus antepasados cruzaron el ecuador desde el sur hacia el norte hace más de 2,5 millones de años. Se ha logrado secuenciar su genoma y ello demostró que este no es el primer cuello de botella genético al que se enfrenta la especie. Esto podría explicar por qué con tan baja natalidad y número de individuos, estos permanecen completamente sanos.
¿Qué es un cuello de botella genético?
Se le llama cuello de botella genético a la situación en la que una especie se enfrenta a una fuerte reducción en el tamaño de su población a causa de eventos de corte medioambiental. El resultado es que la diversidad genética disminuye. Pero los supervivientes son los que están mejor dotados. Por lo que son menos, pero más fuertes.
No soportan el cautiverio
No solo no pueden tenerse en cautiverio, sino que solo se reproducen en determinadas áreas. Esto los ha salvado de acabar en un delfinario haciendo piruetas a cambio de alimento. Pero también impide que los científicos les ayuden, como se hace con algunas especies, creando guarderías donde nacen ejemplares que acaban por liberados en la naturaleza.
Las amenazas de la vaquita marina
El calentamiento global es malo para todas las especies, al igual que las redes de enmalle. Estas últimas son trampas mortales para todos los animales. De hecho, están completamente prohibidas en la zona desde hace muchísimos años, por iniciativa del gobierno mexicano. Pero esta protección parcial no está logrando el objetivo de salvar a las vaquitas marinas. Ni al totoaba, una especie de pez que también está protegida y en grave peligro de extinción.
Este pez es capturado de forma ilegal, puesto que en China se pagan fortunas por su vejiga natatoria (única parte que les interesa a los pescadores). La medicina tradicional considera que esta parte del pez tiene poderes rejuvenecedores, curativos y energizantes. En el mercado negro se puede llegar a pagar hasta 70.000 € el kilo de este producto.
El problema es que la vaquita marina cae muy fácilmente en las redes que se ponen para capturar totoabas. Y al ser un mamífero pulmonado, necesita respirar, por lo que al permanecer sumergida, atrapada en el enmalle, muere ahogada. Día Mundial de la Vaquita Marina 2023.