Comunes, morunos, chillones, molineros o alpinos…
Gorriones. En los pueblos y ciudades, junto al río, en un bosque, en los campos de cultivo y hasta en la más alta montaña. Casi en cualquier lugar se puede encontrar a los gorriones, sociables y gregarios, tanto en época de cría como durante el invierno.
El gorrión común es la especie que presenta una mayor amplitud de nicho, y, por tanto, es posible encontrarlo en multitud de hábitats. Especialmente antropizados, a lo largo y ancho de prácticamente toda nuestra geografía. Muestra un claro dimorfismo sexual en la fase adulta, luciendo el macho un llamativo plumaje más destacado durante el período reproductor. Y siendo los jóvenes prácticamente idénticos a las hembras adultas.
Macho y hembra de gorrión común. Autor: Steve Byland
Gorriones Morunos
El gorrión moruno, distribuido principalmente por el centro y sur de la península, norte de África y Canarias. Muestra una segregación de plumajes igual que el gorrión común. Las hembras y jóvenes de ambas especies suelen ser muy difíciles de distinguir, a no ser que se realice una observación próxima y tranquila, para fijar la atención en ciertos detalles sutiles. Pero, a veces, ni así es posible. Además, llegan incluso a formar bandos mixtos (entre las dos especies).
Gorriones Chillónes
El gorrión chillón, en cambio, no muestra dimorfismo sexual. El plumaje del macho es muy similar al de las hembras de gorrión común y moruno. Y aunque las guías muestran una llamativa garganta amarilla, no siempre es tan fácil observarla, por lo que habrá que recurrir a otros caracteres complementarios. El gorrión molinero es el más pequeño de todos, e inconfundible del resto de sus congéneres. Igualmente inconfundible es el gorrión alpino, una de las aves más destacadas de la alta montaña ibérica. Restringida a los riscos y canchales de los Pirineos y cordillera Cantábrica.
Por otra parte, un buen conocimiento de otras especies próximas a los gorriones como el triguero, la hembra de verderón común o el camachuelo trompetero ayudará a identificar estas aves. La diversidad de gorriones no se queda ahí. Ceuta, Melilla, islas Canarias y el sur peninsular pueden recibir la visita de otros gorriones norteafricanos. Como el gorrión sahariano, que se aventuran a dispersarse por zonas más septentrionales. ¡Ojo avizor!