La que en su momento fue calificada como La peor catástrofe ecológica de la historia, hoy es conmemorada por el mundo en el Día Internacional del No Uso de Plaguicidas. Los niños de Chillán se han hecho parte de este día de reflexión y acudieron a una actividad organizada en el Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA Quilamapu, durante la mañana de ayer viernes.
Alumnos de educación básica y pre básica del Colegio Concepción y Escuela de Oro Verde, participaron de las diversas muestras organizadas por INIA con el fin de sensibilizar a los más pequeños acerca del cuidado del medio ambiente y el respeto por los diversos organismos que viven en la naturaleza y que se ven afectados por esta práctica de la agricultura actual.
A través de una variada muestra de abejas e insectos de todos los colores y tamaños, los profesionales del Centro Tecnológico de Control Biológico de INIA, enseñaron a los niños acerca de la diversidad natural que nos rodea. Los propios alumnos de la escuela de Oro Verde, quienes acaban de ganar dos proyectos de ecología financiados por EXPLORA, fueron los más adecuados para conversar con sus pares acerca de este problema. En tanto, la agrónomo Sigrid Vargas, experta en agricultura orgánica, estuvo a cargo de introducir a los niños en la técnica para preparar el compost, una actividad que tuvo muy buena acogida entre los pequeños.
La especialista en permacultura, Fabiola Salazar de la comunidad Ruka Trunkai (www.permaculturachillan.cl), utilizó lombrices en una interesante charla acerca de la vida bajo la tierra, con el fin de llevarlos a reflexionar acerca de la interacción entre todos los seres que compartimos el planeta.
El Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA, es una institución comprometida con el cuidado del medio ambiente y el desarrollo sustentable. Para esto realiza investigación aplicada en áreas como Control Biológico y Agricultura Orgánica, ambas tendientes a un mismo propósito: eliminar o disminuir el uso indiscriminado de plaguicidas usados en la agricultura convencional. El fin último es garantizar los beneficios de la naturaleza para las presentes y futuras generaciones.