Gracias a un robot submarino se han encontrado miles de bidones radiactivos frente a la costa gallega. Después de más de treinta años, una misión francesa con innovadora tecnología está estudiando las profundidades del océano y el impacto de los desechos.
La aparición de mil bidones durante el primer día de exploración del proyecto Nodssum es apenas la punta del iceberg de la investigación. Luego de tantos años, posiblemente arroje luz sobre el impacto de los residuos radiactivos, escondidos desde hace décadas bajo el agua.
Su origen es la intensa actividad industrial, así como las centrales nucleares. El uso del océano como un cubo de basura, una práctica universal hasta hace unos años, tiene consecuencias. Y próximamente las conoceremos mejor que nunca.
¿Qué pasa con los bidones radioactivos que están hundidos frente a las costas gallegas?
El partido ecologista ha llevado al Parlamento Europeo, con una iniciativa impulsada por su coordinador federal, Juantxo López de Uralde y registrada por la eurodiputada de Podemos, Isa Serra, su preocupación por el estado de los miles de bidones radiactivos frente a la costa gallega.
Durante décadas la industria nuclear europea se deshizo de los residuos radiactivos metiéndolos en bidones que acabarían siendo vertidos en la fosa atlántica, a 600 km de las costas de Galicia. Según datos de Greenpeace, se vertieron 142.000 toneladas de basura nuclear, introducidas en unos 220.000 bidones. Recientes informaciones confirman que el buque L’ Atalante del CNRS francés, habría localizado 3.000 bidones. Como se ve, una parte muy pequeña de lo que se vertió.
En su escrito, desde ambas formaciones han señalado que consideran que la Comisión Europea debe investigar la contaminación radiactiva en la Fosa Atlántica y debe hacerlo de acuerdo con la legislación europea, específicamente la Directiva 2011/70/Euratom sobre gestión de residuos radiactivos. Esta directiva establece un marco comunitario para la gestión responsable y segura de los residuos radiactivos y el combustible gastado.
Por eso, piden que haga un seguimiento de las consecuencias para el medio marino de estos vertidos, así como medidas para prevenir la contaminación radiactiva. Recientemente, desde los partidos políticos ya pidieron en el Congreso al gobierno que se responsabilice de las investigaciones sobre los desechos nucleares frente a la costa gallega, criticando la respuesta y la dejadez del Consejo de Seguridad Nuclear.
“Los miles de toneladas de residuos radiactivos hundidos en la fosa atlántica suponen un riesgo permanente para el medio ambiente marino. Es importante que se mantenga una vigilancia constante sobre los mismos, para ver cuál es la evolución de toda esa acumulación de basura radiactiva, y por eso tanto el gobierno español como la Comisión Europea deben actuar”, señala Juantxo López de Uralde. ECOticias.com