La gestión sostenible del agua es el uso y control del agua de manera responsable y eficiente para satisfacer las necesidades actuales sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para satisfacer sus propias necesidades.
Esto incluye la protección y conservación de los recursos hídricos, así como la promoción de la sostenibilidad ambiental, social y económica. La gestión sostenible del agua abarca una amplia gama de actividades, como la planificación y gestión de la demanda de agua, la protección de la calidad del agua, la gestión de la escasez de agua y la adaptación al cambio climático.
El 6º Objetivo de Desarrollo Sostenible está dedicado al agua. De su enunciado, “garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos”, se desprende que cuidar los recursos hídricos es una responsabilidad compartida por todos.
En ese “todos” están incluidas, por supuesto, las empresas e instituciones, tanto aquellas que por su tipo de actividad tienen en el agua un recurso natural indispensable para sus procesos de producción como aquellas en las que es un elemento complementario. Estas son algunas de las estrategias que pueden seguir las empresas e instituciones para hacer una gestión más sostenible del agua.
El Principado de Asturias movilizará a lo largo de este ejercicio 108,5 millones de euros
La estrategia de gestión sostenible del agua puesta en marcha por el Principado de Asturias movilizará a lo largo de este ejercicio 108,5 millones de euros que permitirán acometer obras en 56 concejos, entre ellas, la transformación de la depuradora de Villaperi, en Oviedo, en una biofactoría, proyecto que supondrá la inversión de 50 millones.
Financiado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, este proyecto integrará la depuración avanzada con la producción de energía renovable y la reducción de la huella de carbono.
También se está llevando a cabo la renovación del interceptor del Nora, en el municipio de Oviedo, con un presupuesto de 6,1 millones, y el refuerzo de los sistemas de abastecimiento para afrontar situaciones de sequía, entre los que se incluye el aprovechamiento del acuífero de Guadamía, en Ribadesella.
Entre las obras que se van a ejecutar cabe destacar la finalización del saneamiento de Aller, con una inversión de 1,6 millones; así como otras actuaciones en los concejos de Salas, Cangas de Onís, Langreo, Gozón, Carreño, Grado, Pravia, Caso, Parres y Llanes.
En colaboración con la sociedad estatal Aguas de las Cuencas de España, el Consorcio de Aguas de Asturias ejecutará dos proyectos que movilizarán 90 millones, de los que 67 se destinarán a la arteria oriental, que garantizará el abastecimiento en los concejos del oriente de Asturias, y 21,5 millones a la arteria del bajo Nalón, reforzará el suministro de agua en el centro-occidente de la comunidad.
Se trata, según la Consejería de Movilidad, Medio Ambiente y Gestión de Emergencias de modernizar infraestructuras hidráulicas, asegurar el abastecimiento en todo el territorio asturiano, avanzar hacia la eficiencia energética y responder a los desafíos del cambio climático, en línea con los planes directores de Abastecimiento y Saneamiento 2030.
“Con esta hoja de ruta, reafirmamos nuestro compromiso de avanzar hacia un modelo de gestión del agua sostenible, seguro y resiliente, a la vez que garantizamos su preservación para las generaciones futuras», ha señalado su titular, Alejandro Calvo, en un comunicado. EFE / ECOticias.com