Italia advirtió hace ya un tiempo que no toleraría ni ecopostureos ni greenwashing a ninguna empresa que quisiera venderle ‘humo’ medioambientalmente correcto a los italianos y aparentemente va a cumplir con su promesa. De hecho ha puesto una cuantiosa multa a Shein, una marca célebre de venta online.
Shein, la mundialmente famosa web de venta de ropa y otros artículos fue objeto de una sanción económica por parte de la (AGCM), quien la cogió ‘in fraganti’ en varias afirmaciones que, o eran imprecisas o vagas o directamente mentían acerca de la circularidad, el reciclaje y el respeto por el medio ambiente de sus productos.
Italia multa a Shein por información engañosa y greenwashing
La Autoridad Garante de la Competencia italiana (AGCM) ha multado a Infinite Styles Services, empresa que opera los sitios web de compraventa de productos Shein en Europa, con un millón de euros por utilizar información engañosa en la venta de ropa de esta marca respecto a promesas de compromisos medioambientales.
«A través de su sitio web y otras páginas web informativas o promocionales, la empresa difundió declaraciones medioambientales en varias secciones que eran en ocasiones vagas, genéricas o demasiado enfáticas, y en otras, omitidas y engañosas», escribe el organismo antimonopolio italiano. Las afirmaciones ambientales «relacionadas con el ‘mercado circular’ o la reciclabilidad de los productos, resultaron ser falsas o, al menos, confusas», explican.
Así como «las afirmaciones utilizadas por Shein para presentar, describir y promocionar la línea de ropa «evoluSHEIN by Design» enfatizan el uso de fibras ‘ecológicas’ sin indicar claramente los sustanciales beneficios ambientales de los productos a lo largo de su ciclo de vida y sin especificar que esta línea de productos aún es marginal en comparación con el total de productos de la marca Shein».
«Al valorar la injusticia de la conducta de Shein, el Antimonopolio destacó el mayor deber de diligencia que le incumbe por operar en un sector altamente contaminante y con métodos altamente contaminantes, como el de la ropa denominada ‘desechable’ (fast and super fast fashion)«, agregan.
Tras la comunicación de la multa, la sociedad declaró: ‘Hemos cooperado plenamente con la AGCM durante todo este proceso y actuamos de forma inmediata para abordar las preocupaciones planteadas en cuanto tuvimos conocimiento de ellas. Hemos reforzado nuestros procesos internos de revisión y mejorado nuestra página web para garantizar que todas las afirmaciones medioambientales sean claras, específicas y cumplan con la normativa’.
Asociaciones de consumidores italianas como Altroconsumo explicaron que «esta sanción demuestra que nuestras denuncias estaban fundadas. Shein no solo utiliza patrones oscuros para impulsar las compras compulsivas, sino que también miente sobre el impacto medioambiental«.
El greenwashing no solo es una estafa, sino que es completamente ajeno a la ética comercial, puesto que actúa contra la buena fe de los compradores, quienes podrían elegir tal o cual producto bajo el engaño de que es más sostenible que otro, cuando en realidad todo es mero ecopostureo. EFE / ECOticias.com