La Unidad de Biofísica (CSIC-UPV/EHU) de la Universidad del País Vasco ha celebrado hoy martes un evento divulgativo con el que se ha querido celebrar el décimo aniversario de sus actuales instalaciones en el Campus de Leioa (Bizkaia)
La Unidad de Biofísica de la UPV -un centro de investigadores creado en 1999 por la Universidad del País Vasco y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, CSIC– ha celebrado esta mañana una jornada científica para conmemorar el décimo aniversario de sus actuales instalaciones en el Campus Universitario de Leioa (Bizkaia).
Expertos en Biofísica, entre ellos el italiano Alberto Diaspro, director del departamento de Nanofísica del Instituto Italiano de Tecnología, han debatido en el foro sobre cómo será la medicina del futuro.
La Unidad de Biofísica (CSIC-UPV/EHU) de la Universidad del País Vasco ha celebrado hoy martes un evento divulgativo con el que se ha querido celebrar el décimo aniversario de sus actuales instalaciones en el Campus de Leioa (Bizkaia), así como los nuevos planes de crecimiento previstos para los próximos años.
La jornada divulgativa, al que han asistido cerca de 150 personalidades del mundo académico y de la empresa, tenía por objeto general promover de una manera sencilla el campo de la Biofísica, y poner en valor la intensa y fructífera trayectoria profesional de los equipos de investigadores adscritos a este centro en los últimos años.
De hecho la Unidad de la UPV/EHU es el único centro del Estado dedicado en exclusiva a la Biofísica, con una plantilla en total cercana a los 100 profesionales entre investigadores de prestigio internacional, técnicos y estudiantes de doctorado y personal administrativo adscritos al centro.
Este centro de investigación fue creado en 1999 a partir de un acuerdo de colaboración entre la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Hace ahora 10 años, la Unidad de Biofísica se establecía en sus actuales instalaciones del Campus de Leioa (Bizkaia).
Sin embargo, el centro de investigación aborda ahora un potente plan de desarrollo y expansión que se plasmará el próximo año en el traslado de la actividad a un nuevo edificio que se está construyendo en el nuevo Parque Científico y Tecnológico de la UPV en Leioa.
El nuevo centro, con una superficie de casi 12.000 m2, tendrá capacidad de triplicar su plantilla, hasta los 300 profesionales. La ampliación de instalaciones permitirá abordar nuevos campos de actuación, como la Biología Estructural y la Biología Computacional, con un amplio recorrido en la investigación científica internacional.
Participación de Alberto Diaspro
El acto ha comenzado tras una presentación del director de esta unidad, Félix Goñi que ha hecho un balance de los diez años de actividad del centro. Goñi ha destacado “una trayectoria llena de hitos científicos, con colaboraciones en destacados proyectos internacionales”. “Todo esto se traduce –continuaba Goñi- en un reconocimiento internacional y en el interés de científicos de prestigio de trabajar en el centro”
El evento científico ha tenido como invitado especial al profesor genovés Alberto Diaspro, Director del Departamento de Nanofísica del Instituto Italiano de Tecnología y expresidente de la Asociación Europea de Sociedades de Biofísica (EBSA). La experiencia del profesor Diaspro está relacionado con el diseño, la realización y la utilización de la instrumentación óptica y biofísica, campo en el que es uno de los cientificos más galardonados del mundo.
Igualmente, han participado en el encuentro Alvaro Villarroel, científico titular del CSIC, Vadim Frolov, profesor Ikerbasque y el catedrático de Bioquímica de la UPV/EHU, José Luis Nieva, los tres investigadores de la Unidad de Biofísica. Los tres participantes han coincidido en explicar la interrelación de la biofísica con avances en enfermedades malditas como puede ser el sida, la tuberculosis, el Alzheimer, o patologías relacionadas con otras enfermedades neuroedegenerativas.
La Unidad de Biofísica de la Universidad del País Vasco fue creada en 1999. Tuvo su origen en el ‘Grupo de Biomembrana’ creado en 1976 por Félix M. Goñi en el Departamento de Bioquímica de la UPV/EHU. En 1996, este grupo se convirtió en una Unidad Asociada al Centro Superior de Investigaciones Científicas, CSIC. Su integración en el CSIC se completó en 1999.
La Unidad de Biofísica de la Universidad del País Vasco tiene por objetivo llevar a cabo estudios de alta cualificación, sobre todo en el campo de las membranas biológicas (una de las especialidades de este centro de investigación). Además, trata de educar a los jóvenes científicos de acuerdo con los estándares internacionales de calidad. El laboratorio de la Unidad de Biofísica de la UPV cuenta con una larga tradición de colaboración con otras instituciones, públicas y privadas.