“El gigante informático aplica una amplia gama de tecnologías verdes, con el fin de ser “cero carbono”. Para ello cuenta con la colaboración de sus propios empleados y de una serie de empresas y organizaciones, que les aportan ideas e innovaciones. Google “devuelve los favores”, en forma de aplicaciones y herramientas, útiles y funcionales.”
Mapeos y seguimiento
Entre otras muchas de las aplicaciones que Google ofrece está la del mapeo de extensas zonas del mundo, para comprobar situaciones que comprometen al Medio Ambiente, como los lagos que se secan, las zonas que están en peligro de desertización y/o el retroceso de los glaciares, todo ello en tiempo real.
Estos datos han sido fundamentales para que muchos científicos del clima, biólogos, geólogos y demás investigadores, puedan llevar a cabo controles, experimentos, proyecciones, etc. con el fin de encontrar soluciones a los problemas ocasionados por el Cambio Climático.
Cooperación
Muchas aplicaciones de la tecnología verde y de los servicios de Google más importantes se originan fuera de la organización. Una parte fundamental del aporte creativo del Global Fishing Watch, un servicio de mapeo para rastrear globalmente la flota pesquera comercial, se lo deben a la ayuda prestada por SkyTruth y Oceana.
Del trabajo conjunto entre Google y el World Resources Institute, surgió el desarrollo de la aplicación Global Forest Watch, que ofrece datos, tecnología y herramientas, a las personas de todo el mundo, que permiten proteger mejor los bosques.
Ecoinnovación interna
Uno de los principios de la empresa es que todos y cada uno de sus integrantes, que se llaman a sí mismos “Googlers”, tiene la capacidad de innovar en verde. Por esa razón tienen algo que se llama la política del “20% del tiempo”.
Eso implica que, todos los que trabajan en la compañía a tiempo completo, pueden (y en teoría, deben) dedicar la quinta parte de su tiempo a llevar a cabo, investigar y desarrollar, sus proyectos de innovación particulares.
Un ejemplo de ello es una iniciativa de uno de sus ingenieros, que pasó 6 meses trabajando en un plan de eficiencia energética, que una vez que se aplicó en uno de los centros de datos de Google, consiguió una reducción del 15%, en el empleo de la electricidad.
El Proyecto Sunroof, que está a disposición de todos los ciudadanos de EEUU, es también una creación de un ingeniero de Massachussets. Esta herramienta en línea calcula la cantidad de paneles solares que necesita una propiedad, en qué sitio podrá comprarlos más baratos y hasta cómo financiarlos, basándose en el código postal del usuario.
Para Google, la creación debe incluir a todos sus integrantes y todas las propuestas y proyectos son valorados y probados en los mismos centros de la empresa. Eso hace que sus empleados se sientan parte del movimiento de innovación en verde, que es el motor de la organización.
Objetivos muy audaces
Google se ha propuesto que, en plazos cortos y accesibles, todas sus instalaciones logren la neutralidad en cuanto a emisiones de carbono. Ese camino lo recorren todos los empleados, ya que cada uno de ellos es capaz de valorar la cuota de generación que les corresponde y buscar formas innovadoras de reducirla.
También quieren ser líderes en sostenibilidad, maximizando cada gramo de ingenio y creatividad de sus asistentes tecnológicos, ingenieros, técnicos y hasta el último de los limpiadores; la premisa es simple: toda buena idea, innovación o proyecto creativo, es bienvenido.
