Los superalimentos exóticos son excelentes
Los superalimentos contienen nutrientes específicos en cantidades importantes, por lo que resulta fundamental que sean parte de la dieta diaria de todo aquel que pretenda tener una vida sana. El ejercicio físico y mental y una ingesta variada, equilibrada y rica en superalimentos pueden hacer la diferencia.
El problema es que, cuando nos ponemos a buscar cuáles son los superalimentos más conocidos y consumidos en Europa en general y en España en particular, nos encontramos ante una larga lista de productos con denominaciones exóticas, cuyo origen es como poco lejano, cuando no, remoto.
Las propiedades de estos superalimentos, su contenido en nutrientes, minerales, vitaminas, proteínas, fibras, antioxidantes u oligoelementos y sus beneficios para la salud son indiscutibles, de hecho, muchos de ellos tienen usos medicinales y/o son consumidos por quienes los plantan y cosechan, desde hace siglos.
El planteamiento relacionado con su exotismo no tiene nada que ver con sus posibles propiedades, dado que desde el momento que integran la categoría de superalimentos es porque se ha demostrado que merecen estar allí. Lo preocupante es la lejanía de su origen y que el costo medioambiental de su transporte, pueda incidir en su huella de carbono y la de quienes los consumen.
Los superalimentos locales también son espectaculares
Y es que a nivel local siempre es factible encontrar una serie de superalimentos, que no solo se producen quizá muy cerca de nuestro hogar o al menos a distancias más prudenciales, sino que poseen muchísimas propiedades, gracias a que también contienen los nutrientes necesarios para categorizarlos como superalimentos.
Además de tener la ventaja de la cercanía, adquirir estos superalimentos es una forma de contribuir a apoyar a los pequeños productores de alimentos ecológicos, artesanales y orgánicos, especialmente en estos tiempos de crisis y cuando es más que necesario que todos nos ayudemos y apoyemos la economía local y nacional.
Y los productos frescos, especialmente si son superalimentos de temporada y están recién cosechados, aportarán más nutrientes que aquellos que han necesitado algún tipo de procesamiento, para conservarlos y permitirles llegar a su destino en condiciones óptimas de ser vendidos y consumidos.
En definitiva, además de maca, moringa, açai, kuzu, aronia o camu-camu, agrega a tu dieta algunos de estos productos, que ya nuestras abuelas sabían que eran superalimentos: brócoli y espinacas ecológicas, cantidades importantes y significativas de ajo, legumbres orgánicas como las lentejas o los garbanzos, frutos secos (nueces, pistachos y almendras) y frutas eco: fresas, cerezas, manzanas y mucho más.