El mercurio, uno de los metales más tóxicos conocidos, continúa siendo una amenaza silenciosa para la salud humana y el medio ambiente.
Según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 20 millones de personas en el mundo podrían estar expuestas a niveles peligrosos de este contaminante a través del consumo de pescado, el uso de cosméticos y la contaminación ambiental derivada de actividades industriales y mineras.
En el caso del pescado, el problema radica en la bioacumulación: el mercurio vertido a ríos y océanos se transforma en metilmercurio, una forma altamente tóxica que se concentra en los tejidos de los peces. Por otro lado, algunos productos cosméticos, en particular ciertas cremas blanqueadoras y jabones aclarantes, contienen mercurio como agente despigmentante.
Mercurio por todos lados
Los niveles de mercurio en el medioambiente por actividades humanas han aumentado y 20 millones de personas en el mundo pueden estar en riesgo de exposición a este metal tóxico, advirtieron este lunes los responsables del Secretariado del Convenio de Minamata sobre el Mercurio.
En una rueda de prensa a una semana de que se celebre en Ginebra la conferencia de las partes firmantes del convenio recordaron que el ser humano está expuesto a este metal tóxico principalmente a través de la comida y alertaron de que, por ejemplo, la concentración de mercurio en el atún no ha bajado en cincuenta años.
También consideraron preocupante la presencia de mercurio en productos cosméticos para el aclarado de la piel, cuyas ventas se han disparado globalmente, especialmente en el mercado online, ya que el metal tóxico inhibe la producción de melanina y provoca el aclarado del cutis, según explicó la secretaria ejecutiva del Convenio de Minamata, Monika Stankiewicz.
El convenio ya prohíbe la fabricación y el comercio de cosméticos que contengan mercurio, pero aun así, subrayó, estos productos de aclarado de la piel se venden en todo el mundo. «No es un problema solo de los países en desarrollo, también están disponibles en Estados Unidos y en la Unión Europea», señaló.
Stankiewicz puso el foco en la publicidad «poco ética» que se hace de estos productos, «donde se promueven estándares de belleza que sugieren que las mujeres con piel más clara pueden tener mejores oportunidades de matrimonio o perspectivas laborales».
El secretariado también alertó sobre las amalgamas dentales que usan mercurio, prohibidas ya en mujeres en edad fértil, embarazadas y niños, pero que siguen suponiendo un riesgo para los dentistas, expuestos a los vapores del metal tóxico.
La actividad que influye en mayor medida en las emisiones de mercurio al medioambiente es la minería de oro a pequeña escala, responsable del 20 % de la producción global de este metal precioso, indicaron los responsables del secretariado.
La Organización Mundial de la Salud advierte que la exposición al mercurio puede provocar insuficiencia renal, trastornos neurológicos y del comportamiento, es peligrosa para el feto y, además, el mercurio es corrosivo para la piel, los ojos y el tubo digestivo.
En la sexta reunión del Convenio de Minamata sobre el mercurio, del 3 al 7 de noviembre, los 153 países firmantes del tratado debatirán medidas para reducir la presencia y la exposición al mercurio.
Plantearán así un mayor control en la prohibición de los cosméticos para el aclarado de la piel, de las amalgamas dentales para 2030 y la estandarización de la minería a pequeña escala para favorecer inversiones tecnológicas que ayuden a depender menos del mercurio para separar el oro.
El ambiente tampoco escapa a esta amenaza. Las emisiones industriales, la quema de carbón y la minería artesanal del oro liberan grandes cantidades de mercurio al aire, el agua y el suelo, afectando a comunidades enteras y ecosistemas completos.
Frente a este panorama, los expertos insisten en la necesidad de fortalecer los controles internacionales, promover alternativas seguras y educar a la población sobre los riesgos. Reducir la exposición al mercurio es una cuestión urgente de salud pública y de protección ambiental global. EFE / ECOticias.com














