Actualizar

sábado, septiembre 23, 2023

El Pacto de Leticia es clave para preservar la Amazonía y reconocer el valor de la naturaleza

Ttodos los países deben comprometerse a un Nuevo Acuerdo para la Naturaleza y las Personas en 2020, que proteja y restaure la naturaleza a nivel global para el año 2030, en relación al Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. 

Reconocemos el importante compromiso político alcanzado este pasado fin de semana en el Pacto de Leticia (Colombia) por parte de los líderes de siete países amazónicos que firmaron este pacto por la Amazonía.

Pero invitamos a los signatarios a complementar el acuerdo con varias acciones estratégicas necesarias para una implementación efectiva y de alto impacto, como:

  • Valorar los beneficios sociales y ambientales del bioma,
  • Comprometerse a alcanzar deforestación neta cero,
  • Proteger los territorios colectivos y la integración del pacto a través de instrumentos previos bajo la OTCA o Redparques, que contienen propuestas similares. 

También les pedimos que colaboren en la implementación a largo plazo de este tratad, así mismo, creemos que la sociedad civil a apoyar y responsabilizar a los gobiernos del cumplimiento de sus compromisos.

La ciudadanía mundial tiene mucho que decir sobre la Amazonia, ya que su bienestar o malestar tiene un impacto global.

Sin Amazonas, el cambio climático se acelera…

Contamos contigo para seguir haciendo presión para la correcta conservación del bosque tropical más grande del mundo, que es el pulmón del Planeta.

FIRMA LA PETICIÓN 

El pasado viernes, líderes de siete países amazónicos (Evo Morales, de Bolivia, Iván Duque, de Colombia, Lenin Moreno, de Ecuador, y Martín Vizcarra, de Perú, además de delegados de Surinam y Guyana, Bolsonaro, Brasil, participó por teleconferencia.

No acudieron a la citarepresentantes de Venezuela y La Guayana Francesa) asistieron a una cumbre en Leticia, Colombia, para coordinar esfuerzos y respuestas ante la crisis actual que atraviesa la Amazonía, incrementar la colaboración regional para proteger el bosque tropical más grande del mundo y promover el uso sostenible de los recursos que facilita este ecosistema.

El resultado de esta reunión «express», movida por «la crisis del fuego», es el Pacto de Leticia.

Este acuerdo va más allá de combatir los incendios forestales que actualmente siguen afectando la Amazonía e incluye compromisos en temas clave como la monitorización conjunta, estrategias para combatir la deforestación y la degradación de los ecosistemas.

Así mismo, se refiere a acciones de restauración y uso sostenible, mecanismos de cooperación, intercambio de experiencias y lecciones aprendidas, entre otros.

Lo bueno del tratado:

Es muy importante que el Pacto haya reconocido la importancia de las sinergias con los convenios y tratados internacionales y regionales mencionados en el documento: entre los cuales se incluyen el Convenio de Diversidad Biológica, el Convenio Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y el Convenio de Minamata sobre Mercurio.

Y también la creación de una Red de Cooperación Amazónica para enfrentar desastres naturales, y el compromiso de fortalecer los mecanismos y programas financieros.

El Pacto Amazónico de Leticia reconoce que existe una necesidad urgente de implementar y generar sinergias entre la agenda del cambio climático, la Agenda 2030 y el proceso de construcción de un marco global para la biodiversidad más allá del 2020.

Pero se puede pedir más:

A pesar de que el Pacto incorpora pautas estratégicas para la colaboración transfronteriza y para la acción nacional, éste es un acuerdo no vinculante y, por lo tanto, debe ir acompañado de acciones estratégicas para tener un impacto real.

Cabe recalcar que para combatir la crisis amazónica se deben considerar todas las amenazas que afectan el bioma. 

La Amazonía está experimentando cambios rápidos, con algunos acontecimientos que amenazan su integridad, sus especies y el conjunto de beneficios locales y globales que proporciona, lo que disminuye su capacidad para estabilizar y regular el clima a nivel regional y global. 

Actualmente, los principales agentes de cambio son la expansión de la agricultura y la ganadería, el desarrollo de infraestructura y las actividades extractivas, que están relacionadas con la pérdida de bosques y la degradación de los ecosistemas. 

La implementación de estrategias de cero deforestación y cero degradación, junto con medidas para asegurar la conectividad e integridad de este ecosistema, en un contexto de equidad social, desarrollo económico inclusivo y responsabilidad global, es de suma importancia para abordar la crisis amazónica. 

En segundo lugar, pedimos a los signatarios del Pacto que desarrollen acciones y compromisos a través de instrumentos ya existentes, por ejemplo, los elaborado bajo la OTCA o REDPARQUES, que contienen propuestas similares, para evitar duplicar esfuerzos.

Por último, aunque el Pacto menciona la necesidad de fortalecer las capacidades y la participación de los pueblos indígenas y tribales y las comunidades locales en el desarrollo sostenible de la región amazónica, y reconoce su papel fundamental en la conservación de la región, creemos en la necesidad de acciones más concretas para proteger los territorios colectivos, fortalecer la gobernanza local, promover mecanismos para una participación comunitaria efectiva y reconocer el papel de las comunidades locales en la conservación de la Amazonía.

El Pacto Amazónico de Leticia: un paso clave hacia un Nuevo Acuerdo para la Naturaleza y las Personas

El Pacto Amazónico de Leticia es un paso sin precedentes para reconocer el valor político de la naturaleza.

Sin embargo, existe la necesidad de ampliar esfuerzos más allá de la Amazonía, ya que la biodiversidad a nivel mundial se encuentra más amenazada que nunca antes en la historia de la humanidad.

Fuente: WWF

ARTÍCULOS RELACIONADOS

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Lo último

Antes de irte

No te lo puedes perder

Otras noticias de interés