China se adueña de la rotación de la Tierra sin previo aviso. Las consecuencias de la presa hidroeléctrica más poderosa comienzan a notarse. Si te sorprendió el anuncio del país asiático sobre el panel solar definitivo, no puedes perderte lo que viene a continuación. En líneas generales, las centrales hidroeléctricas son infraestructuras que utilizan energía hidráulica para producir grandes cantidades de energía eléctrica.
Sus infraestructuras están diseñadas de tal forma que aprovechan la fuerza con la que impacta a una corriente de agua sobre una turbina haciéndola girar a gran velocidad. El movimiento de giro se transmite a través de mecanismos para que un generador eléctrico emplee el movimiento de rotación y produzca energía eléctrica. Para que esta base pueda funcionar correctamente debe tener una masa considerable de agua, que tenga capacidad suficiente para hacer girar una turbina, muchas veces de grandes dimensiones.
Para ello, suele almacenarse agua principalmente en embalses o represas. Sin embargo, la planta de energía a través de agua de China da un paso más y se apodera incluso de la rotación de la Tierra.
China y la rotación de la Tierra están unidas: las consecuencias inesperadas de la presa hidroeléctrica más poderosa
Estudios recientes aseguran que la imponente planta de las Tres Gargantas, situada en el río Yangtsé en China, está teniendo un fuerte impacto en la rotación del planeta. Se explica por su habilidad para generar 22.500 megavatios y su capacidad para regular inundaciones. El levantamiento de esta presa ha desplazado a más de 1,2 millones de personas y alterado de manera sutil la duración de los días en la Tierra.
Hablamos de la mayor estación de energía a través de agua en términos de capacidad producción. Ubicada en el cauce del río asiático más largo, el Yangtsé, se construyó para generar energía renovable, controlar las posibles inundaciones y facilitar la navegación de la zona. 1994 fue un año decisivo para el proyecto, momento en el que comenzó la construcción, que no concluyó hasta 2006. El proceso monumental duró más de una década, pero la instalación total de los generadores duró mucho más: no llegó a completarse hasta 2012.
Entre los rasgos más relevantes de esta presa encontramos que tiene una longitud de más de 2 kilómetros, una altura de alrededor de 180 metros, una capacidad de generación de 22.500 megavatios y unos objetivos claramente delimitados (nombrados anteriormente). Desde el principio, la magnitud de la propuesta suscitó tanto orgullo como preocupación. Mientras algunos centraban su atención en su monumental capacidad para generar energía limpia, otros reparaban en su considerable impacto social y medioambiental (que incluía el desplazamiento de más de 1,2 millones de personas y la alteración de ecosistemas locales).
La rotación de la Tierra, en manos de China: el inesperado impacto de la planta más poderosa
Una de las consecuencias más sorprendentes de las Tres Gargantas ha sido su incidencia en la rotación de la Tierra. La redistribución masiva de agua generada por esta presa alteró sutilmente la distribución de la masa terrestre, dando como resultado un efecto inesperado en la inercia del planeta.
Según informa el portal IFLScience, las afirmaciones sobre este fenómeno parecen proceder de un artículo publicado en 2005 por la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), donde se analiza cómo el terremoto y tsunami del Océano Índico influyó en la rotación de la Tierra.
Provocó así un aumento leve pero medible en la duración de los días. En el año 2005, el Dr. Benjamin Fong Chao, geofísico del Centro Goddard de Vuelos Especiales de la NASA, expuso que la majestuosa presa china tenía capacidad para contener 40 kilómetros cúbicos de agua, ocasionando un desplazamiento de masa que incrementaba la duración de un día en 0,06 microsegundos y movilizar la posición del polo de la Tierra unos 2 centímetros (0,8 pulgadas).
En definitiva, China se ha apoderado de la rotación de la Tierra a través de una presa de energía por agua incluso más poderosa que planta colosal a 3.000 metros de altitud.