El titanio está desbancando al hidrógeno como nunca. Los europeos (y otros muchos ciudadanos del mundo) planean comprar coches eléctricos en menos de 5 años debido a la imposición de medidas ambientales por parte de las autoridades. Comprar un vehículo que funciona con motores de combustión ya no es una opción tan atractiva como antes debido a la emisión de gases de efecto invernadero que genera. Además, pronto podría estar prohibida su venta.
Una inversión tan sustanciosa como la de un vehículo merece un modelo que puede utilizarse por mucho tiempo y no solo “por ahora”. Es así como los coches eléctricos han tomado un gran protagonismo en los últimos años y, aunque muchos apuestan por ellos, no son perfectos. Con el fin de afianzarlos en la industria, un gran número de compañías estudian nuevas formas de aplicar esta tecnología para que cumpla las expectativas de todos.
Así es como se ha llegado a la conclusión de que el titanio es la auténtica revolución del sector del transporte y no el hidrógeno. Los coches eléctricos tal y como los conocíamos hasta ahora podrían cambiar para siempre.
El hidrógeno ya no es el protagonista: esto es lo que va a pasar con los coches eléctricos
La compañía japonesa Toshiba ha encontrado la fórmula para que las baterías carguen rápido sin estropearse y sean más seguras. Gracias a su estructura interna y el uso de óxido de titanio y niobio, esta batería puede cargarse completamente en menos de 10 minutos sin afectar a la salud de la misma.
El dominio de Toshiba en el sector tecnológico y electrónico engloba múltiples productos, incluyendo las baterías. La compañía japonesa, de la mano de Sojitz Corporation y la brasileña CBMM, presentó hace poco la nueva generación de las baterías SCiB. Estas emplean óxido de titanio y niobio (NTO) en el ánodo y obtienen unas buenas prestaciones, especialmente en cuanto a recarga rápida y seguridad.
Estas tres empresas han celebrado una ceremonia en la que han presentado un prototipo de autobús eléctrico equipado con una innovadora batería de nombre comercial SCiB Nb. Alberga la llamativa capacidad de cargarse en solo 10 minutos y brinda una alta densidad energética.
El autobús ha empezado sus pruebas y operaciones de demostración en la planta industrial de CBMM en Araxá (Brasil). La empresa es el mayor productor mundial de niobio, uno de los elementos crucial de esta batería.
Los coches eléctricos cambian para siempre: esta vez el hidrógeno no tiene nada que ver
El autobús ha sido creado por la división brasileña de Volkswagen Truck & Bus y se utilizará en la planta de CBMM para recopilar datos sobre las características de la batería NTO y el funcionamiento del vehículo, un movimiento que hará posible la realización de ajustes necesarios para su comercialización.
Este autobús será el primer vehículo eléctrico del mundo impulsado por una batería de iones de litio con ánodos de NTO. Con este “pequeño” paso se prepara el camino hacia la comercialización de esta tecnología. La meta es lanzar al mercado esta batería de nueva generación en la primavera de 2025.
El hidrógeno queda a un lado con la llegada del titanio a los coches eléctricos
El óxido de titanio y niobio (NTO) brinda el doble de densidad energética por unidad de volumen teórica si lo comparamos con el ánodo de grafito, que es el material usado generalmente en las baterías de iones de litio actuales.
Esta pieza cuenta con una densidad energética volumétrica de 350 Wh por litro y un voltaje nominal de 2,3 V. Asimismo, el uso de óxido de niobio en el ánodo de las baterías brinda características especiales a este elemento. Como alojan litio a un voltaje inherentemente estable, aportan una mayor seguridad y menor riesgo de incendios.
Por motivo de su estructura cristalino abierta, que facilita la intercalación de litio, permite cargas sumamente potentes (en unos 10 minutos) sin causar daño a la batería. El primer acuerdo de estas tres firmas se firmó en junio de 2019. Después llegaron a otro acuerdo de desarrollo conjunto en septiembre de 2021 para diseñar sistema de producción en masa de baterías como estas, especialmente destinadas a aplicaciones en vehículos comerciales eléctricos.
En agosto de 2023, las tres compañías firmaron un acuerdo conjunto de ventas y marketing para desarrollar una cadena de suministro y promover actividades comerciales. Sojitz será la figura encargada de la gestión de la cadena de suministro y ventas. Por otro lado, CBMM tomará el rol del suministro del niobio.
En definitiva, los coches eléctricos cambian para siempre gracias al titanio. Aunque el hidrógeno sigue siendo una apuesta interesante, esta revolución puede cambiar la industria para siempre.



















